Multiculturalismo es un término que hace alusión a la convivencia de diferentes culturas en un mismo espacio físico, ya sea un espacio geográfico o uno social. Al hablar de culturas, se alude tanto a grupos con ideas, costumbres y valores propios, sino también a comunidades sociales de distinto tipo (en función de la edad, la identidad o el género, entre otras).

La noción de multiculturalismo, además, trae arraigada la noción de que esta convivencia es armoniosa, tolerante y pacífica; sin embargo, en muchas ocasiones no ocurre de esa manera.

Este vocablo surge del término multi-, es decir, muchos o varios y cultūra, es decir, conjunto de distintos modos de vida, costumbres, tradiciones e ideas.

Multiculturalismo
El multiculturalismo alude a la coexistencia, no necesariamente armónica, de distintas comunidades culturales.

Historia.

Si bien el concepto de multiculturalismo es uno reciente (aproximadamente, se comenzó a utilizar con el significado actual desde el siglo XX), esta práctica es muy antigua. Podemos remontarnos a sus orígenes en función de cómo vivían los antiguos pueblos de la sociedad occidental, aunque no sea una práctica ajena a sociedades como la oriental.

Si consideramos, por ejemplo, la antigüedad griega, todo aquel que no perteneciese a alguna de las ciudades griegas era considerado un extranjero. En el entramado social, no gozaba de ningún respeto, en una actitud que, hoy, entenderíamos como xenofobia.

Esta falta de tolerancia hacia quienes no tuviesen la ciudadanía griega (a la que, además, solo accedían los hombres libres), hizo que el diálogo intercultural no fuese posible. Cabe destacar que son los griegos quienes dieron origen a la palabra bárbaro: proviene del término βάρβαρος y significa aquel que balbucea.

Esta era la denominación que recibían quienes no hablaban la lengua griega. Frente a la imposibilidad de comprender lo que decían, se ejercía discriminación contra quienes provenían del otro lado de las fronteras.

Con el paso del tiempo, las constantes conquistas, los dominios de territorios ajenos y las invasiones llevaron, casi inevitablemente, a que pueblos con una marcada identidad cultural respecto de otros debieran convivir, integrarse y habitar en la interculturalidad

Conquistas e invasiones
Las conquistas e invasiones son dos de los fenómenos que más rápidamente forzaron a comunidades diferentes a convivir.

Este proceso, contrario a lo que términos como melting pot (es decir, crisol de culturas) sugieren, no fue nunca pacífico ni armónico. Cuando una cultura dominante, es decir, vencedora, se erigía frente a un pueblo vencido, imponía su lenguaje, su religión, tradiciones y su propios valores sociales.

A lo largo de la historia, el ejercicio de la cultura minoritaria muchas veces fue perseguido, castigado y forzado a quedas en el plano íntimo, familiar, para adaptarse a los códigos culturales hegemónicos. De este modo, no es casual que muchos pueblos, a lo largo de la historia, dejaran de practicar sus tradiciones, que no pudieran tener sus propias celebraciones culturales y que, poco a poco, su herencia cultural fuera perdiéndose.

Fenómenos que impactaron sobre las culturas.

A lo largo de la historia, encontramos múltiples fenómenos históricos que, en muchos casos, acabaron con la vida de miles de personas y, con ello, con sus tradiciones y prácticas.

Uno de estos fenómenos se conoce con el nombre de diáspora (del griego διασπορά, diáspora, es decir, dispersión): se emplea para señalar las migraciones masivas de etnias o pueblos desde sus lugares de origen. Fundamentalmente, es un vocablo vinculado con la experiencia del pueblo judío, su exilio de Israel y su dispersión por todo el mundo. 

Sin embargo, otros pueblos fueron expulsados de sus tierras a lo largo de la historia:

  • La diáspora africana hace alusión al exilio que sufrieron múltiples poblaciones del continente, como parte de, en líneas generales, el proceso de colonialismo y la esclavitud a la que fueron sometidos.
  • La diáspora armenia es el fenómeno por el que la población de este país migró a diferentes países a lo largo del mundo. Esto ocurre como resultado de conflictos bélicos y, entre otros, el genocidio armenio, una masacre que tuvo lugar desde el 24 de abril de 1915. En él, más de un millón y medio de ciudadanos fueron arrestados y fusilados.
Migración y exilio
Las migraciones son uno de los fenómenos que lleva a grandes comunidades a trasladarse forzosamente hacia otro país.

La instalación de estas poblaciones migrantes en otros países, el desarraigo por la expulsión de sus tierras o el exilio forzado, lleva a que muchas veces estos pobladores construyan comunidades en la nueva tierra. De este modo, al mantenerse cerca, pueden sostener, colectivamente, sus tradiciones, su lengua, su gastronomía y su arte, incluso, y fomentarlo en una nueva nación.

Otro fenómeno vinculado con este concepto es el de genocidio cultural, que expresa cómo se elimina, física y simbólicamente, la huella de un pueblo, una etnia o una comunidad, en tanto en cuanto comunidad cultural y social.

Esta palabra, a menudo, se vincula con el término etnocidio: la palabra se emplea para señalar los exterminios masivos de culturas indígenas, fundamentalmente.

Uno de los ejemplos de genocidio cultural que han ocurrido en la historia se vincula con el genocidio que las poblaciones indígenas americanas sufrieron desde el siglo XVI en adelante. La llegada de los colonos europeos, de la mano de una búsqueda de expansión que la Iglesia católica deseaba efectuar, provocó diversos eventos, En primer lugar, la violenta conquista de estos pueblos que, superados en armamento y tecnología, sucumbieron.

Posteriormente, las enfermedades extranjeras no pudieron ser resistidas en el continente: esto provocó que gran parte de los pobladores fuesen diezmados. Luego, la paulatina implementación de un sistema colonial extractivista que, en consonancia con la expansión religiosa forzada en todo el continente, provocó que se destruyeran documentos, lenguas, tradiciones y religiones de los habitantes locales.

Multiculturalismo y derechos humanos.

ONU
La ONU, desde 1948, ampara los derechos de las distintas comunidades culturales para su libre expresión.

El Consejo de Derechos Humanos de la ONU (HRC, en inglés), es un organismo cuya labor es proteger, fortalecer y promover la protección y el cumplimiento de los derechos humanos a lo largo de todas las naciones.

Esta labor, que es llevada a cabo desde 2006, busca amparar las diferentes comunidades étnicas del mundo. Así, se apunta a promover sus culturas y alimentar la diversidad lingüística, la diversidad religiosa y el pleno ejercicio de la identidad cultural.

Cabe destacar que, entre el conjunto de derechos humanos avalados por la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948), se encuentran los siguientes derechos inalienables:

  • El derecho de todo hombre a expresarse en su lengua;
  • A manifestar su religión, sus tradiciones y costumbres en libertad;
  • A participar libre y activamente de la vida cultural de su comunidad, entre otras.

De este modo, el multiculturalismo apunta a poder ejercer la propia cultura sin prejuicio o estereotipos que encasillen sus prácticas. Así, la democracia puede gozar de una sociedad multicultural, donde todos los habitantes puedan manifestarse libremente.

Citar este artículo

Fernández, A. M. (31 de julio de 2023). Definición de multiculturalismo. Historia, fenómenos y ejemplos. Definicion.com. https://definicion.com/multiculturalismo/