Los estudios de género comprenden un amplio campo de investigación acerca de las cuestiones de género y sus diversas problemáticas en la sociedad, la cultura, el pensamiento y la política. Se trata de un estudio interdisciplinario que abarca diversas áreas como la filosofía, la sociología, la psicología y la cultura desde una perspectiva de género, es decir, desde una posición crítica sobre de las relaciones de género en la sociedad. Entre sus áreas más importantes se destacan el feminismo, la teoría queer y los estudios LGBT+.

Bajo la expresión «cuestiones de género» se despliega un amplio campo de problemáticas relativas al género que atraviesan todos los ámbitos de la cultura y la sociedad. La sexualidad, la identidad de género, la desigualdad de género, el patriarcado y el establecimiento de los roles de género en la sociedad son temáticas fundamentales de los estudios de género.

Los intereses del estudio de género se expanden a campos muy diversos como la literatura y el lenguaje, la filosofía y las ciencias, la ética y la política, el trabajo y la economía, el derecho y la justicia. En todos los casos, se busca investigar cómo se producen y reproducen las relaciones de género y qué problemáticas atraviesan en la sociedad y la cultura. Principalmente, se estudian las relaciones de poder que se establecen a partir del género, y los sistemas de legitimación y perpetuación de la desigualdad de género en todas sus formas.

Una de las filósofas feministas más destacadas del siglo XX, Simone de Beauvoir, señala que el concepto de «género» debe ser estudiado como una construcción social y cultural y no una categoría biológica. Para Beauvoir, el «género» no es una categoría pura o natural de los seres humanos, sino que se trata de una construcción social y cultural que está condicionada por las concepciones y relaciones socioculturales. Dichas relaciones sociales determinan los conceptos de qué es «ser hombre» y qué es «ser mujer» según un sistema binario de género que reproduce la desigualdad y la subalternidad de la mujer en la sociedad.

La crítica al biologicismo de género representa una de las fuentes principales para abordar los estudios en materia de género. Desde la perspectiva de género, la idea de que existe una determinación biológica que define al «hombre» y a la «mujer» es un constructo puramente social y cultural y no una realidad natural dada por la biología. Este principio es de vital importancia para desvincular la idea de género de la «naturaleza humana» o su realidad biológica.

Los estudios de género guardan una estrecha relación con diversas formas de activismo por cuestiones de género (feminismo, activismo LGBTQ+, etc.). Esta relación está dada debido a que «estudiar las cuestiones de género» implica reconocer las profundas problemáticas sociales que atraviesa nuestra sociedad en materia de género. En este sentido, los estudios de género se realizan en el marco de una sociedad que produce y reproduce altos niveles de violencia de género, desigualdad, discriminación, sexismo y machismo. Esto implica la necesidad de abrir un área de estudio específica para abordar críticamente las profundas problemáticas de nuestra sociedad vinculadas al género.

Problemáticas de género
Los estudios de género abordan las diversas problemáticas sociales vinculadas al género en todos los ámbitos de la vida social

Historia y evolución de los estudios de género.

Las primeras aproximaciones teóricas y críticas referentes a las cuestiones de género comienzan a surgir a partir de la segunda mitad del siglo XX, especialmente durante los años sesenta. Las luchas de los diversos movimientos sociales y el avance progresivo del feminismo desde la obtención del sufragio femenino dieron lugar al surgimiento de los primeros estudios teóricos sobre el género y sus problemáticas en la sociedad.

Movimiento de liberación de las mujeres.

El llamado Movimiento de Liberación de las Mujeres, surgido a finales de la década del 60, se constituyó como un movimiento político de mujeres que fue de vital importancia en el desarrollo del intelectualismo feminista de la época. El movimiento estuvo compuesto por grupos diversos de mujeres de trasfondos sociales, raciales y de clase que buscaron exponer las profundas desigualdades de género en la sociedad machista y patriarcal. Desde el lugar de marginalidad de las mujeres, el movimiento se orientó a plantear que, para que las mujeres dejaran de ser un género subalterno en la sociedad, debían transformarse las estructuras sociales que establecían una opresión y desigualdad en los roles de género. En este sentido, el movimiento puso especial énfasis en visibilizar la desigualdad de género y la importancia de consolidar la libertad económica, laboral, política y social de las mujeres en todo el mundo.

Sus actividades se desarrollaron con intensidad hasta la década del 80, especialmente en los países centralizados occidentales e impulsaron una profunda transformación social a nivel político, cultural e intelectual en la sociedad contemporánea. La influencia del MLM en todo el mundo consolidó las bases para el desarrollo sistemático de los estudios de género y la perspectiva crítica de la sociedad en materia de desigualdad de género.

Movimiento por la liberación de las mujeres
El movimiento por la liberación de las mujeres fue de vital importancia para el desarrollo del pensamiento feminista y los posteriores estudios de género

Antecedentes históricos y precursoras de los estudios de género.

Si bien, los estudios de género tienen su correlato histórico a partir de la segunda mitad del siglo XX, sus antecedentes intelectuales, sociales y políticos se remontan a la época de la Revolución Francesa, la Ilustración y las nuevas relaciones de producción del capitalismo industrial. En este marco, las nuevas ideas del iluminismo y el impuso revolucionario iniciado en Francia tuvieron también a importantes pensadoras y revolucionarias mujeres cuya obra e influencia fue sistemáticamente oprimida y segmentada en la formación de una nueva sociedad basada en los «derechos del hombre y el ciudadano».

Entre las precursoras más destacadas del movimiento en esta época se encuentra la escritora y filósofa política francesa Olimpia de Gouges. En su obra Declaración de los derechos de la mujer y la ciudadana (1791), expuso que los derechos naturales de las mujeres eran limitados por la tiranía del hombre y que dicha desigualdad debía ser reformada según las leyes de la razón. Por esta obra y su radical opinión, Olimpia de Gouges fue juzgada y finalmente guillotinada por el gobierno de Robespierre en 1793, al que ella misma adhería.

Un año antes, en 1972, la escritora inglesa Mary Wollstonecraft publica su obra Vindicación de los derechos de la mujer en la cual establece las bases de las principales demandas para los derechos femeninos: la igualdad en los derechos civiles, políticos, educativos y laborales y el derecho al divorcio como elección libre e igualitaria entre las partes.

Posteriormente, durante el siglo XIX, Flora Tristán, pensadora y escritora francesa de ascendencia peruana, vinculó las luchas de los derechos de las mujeres con las luchas obraras. En 1842, escribe su obra La unión obrera, en la cual presenta el proyecto de formar un movimiento internacional de mujeres trabajadoras. En una de sus líneas más célebres, expresó: «Las mujeres son las proletarias del proletariado, hasta el más oprimido de los hombres desea oprimir a otro ser: su mujer».

Revolución francesa y feminismo
A partir de la revolución francesa, importantes pensadoras y activistas mujeres fueron de vital importancia para el desarrollo del pensamiento feminista y la expansión de los derechos de las mujeres

Movimiento sufragista.

Los movimientos sufragistas de mujeres a partir de la segunda mitad del siglo XIX y principios del XX dieron los primeros pasos en la lucha por la igualdad de género en la sociedad. Tanto en Europa como en Estados Unidos, surgieron movimientos de mujeres que abogaban por el derecho al voto femenino.

En 1948, se funda, en Estados Unidos el primer movimiento sufragista femenino, mediante un documento llamado Declaración de Sentimientos de Séneca Falls, redactado por Elizabeth Cady Stanton y Lucretia Mott. La declaración apuntaba a reformar las condiciones de desigualdad política y social de las mujeres abogando por la igualdad de género y el derecho al voto femenino. Se consideró a este documento el manifiesto fundacional del movimiento sufragista femenino internacional.

A partir de entonces, los diversos movimientos sufragistas se desarrollaron en todo el mundo a través de la consigna fundamental de conseguir el derecho al voto femenino y la igualdad de género en la sociedad.

Movimientos sufragistas
El movimiento sufragista sentó las basas de la lucha por el voto femenino

Bases teóricas de los estudios de género.

Feminismo y teoría feminista.

La teoría feminista es el estudio sistemático y filosófico de las cuestiones referentes al feminismo como movimiento social y político. Se trata de un amplio conjunto de estudios que abarcan áreas muy diversas como la filosofía, la sociología, la antropología, la psicología, la política, la crítica literaria, el psicoanálisis y, especialmente, los estudios de género.

La teoría feminista se orienta a desarrollar un análisis crítico y teórico de las condiciones de desigualdad de género en la sociedad, analizando las estructuras sociales y políticas que sostienen el sistema patriarcal como un orden opresivo sobre las mujeres y disidencias sexuales. Principalmente, la teoría feminista estudia las relaciones de poder en la sociedad a partir de las diferenciaciones de género y sexualidad. Busca establecer una crítica a los privilegios del patriarcado como sistema de opresión del hombre sobre la mujer y el resto de las disidencias en materia de género, clase y etnia.

Las diversas elaboraciones teóricas del feminismo se desarrollan en temáticas como:

  • Roles de género: estudios de la masculinidad y estudio de la mujer.
  • Patriarcado y opresión sistémica (machismo, micromachismos, violencia de género, acoso sexual, feminicidio).
  • Brecha salarial de género.
  • Equidad de género.
  • Discriminación de género.
  • Crítica a la misoginia y el androcentrismo.
  • Historia de las mujeres y empoderamiento femenino.
  • Política de género, derechos reproductivos y anticoncepción.
Teoría feminista
La teoría feminista es el estudio sistemático y filosófico de las cuestiones de género en la sociedad

Feminismo interseccional.

El feminismo interseccional es una rama del feminismo que estudia el género como una categoría interrelacionada con cuestiones de clase, etnia y orientación sexual. La interseccionalidad es un concepto central de la teoría feminista, ya que expone que la opresión sistémica del patriarcado no sólo se despliega en el género, sino que las desigualdades sociales se ejercen también a partir de la clase social, la etnia y la orientación sexual de las personas. En este sentido, la violencia y desigualdad ejercida por el sistema patriarcal no sólo se funda en el machismo, sino que también está estrechamente vinculada con el racismo, el clasismo y la discriminación a toda otra forma de identidad sexual que no responda a los estereotipos de género binarios.

Así, la violencia interseccional del sistema ejerce la desigualdad a partir de:

  • Privilegios de género.
  • Privilegios de clase.
  • Privilegios de etnia.
  • Discriminación sistémica.
Interseccionalidad
La interseccionalidad es un concepto que atraviesa cuestiones de género, etnia y clase social

Variantes y especificidades del feminismo.

  • Feminismo radical: Sostiene que la raíz de todas las desigualdades sociales se debe al patriarcado entendido como el sistema de opresión del hombre hacia la mujer. El feminismo radical exige una transformación total de la sociedad en función de la eliminación de los privilegios del hombre y el establecimiento de una nueva sociedad que elimine por completo la supremacía masculina, a la vez que reconozca a la mujer y las disidencias como parte central de la sociedad.
  • Feminismo negro: También llamado afrofeminismo, es una rama que estudia la interseccionalidad entre género y etnia, y la relación entre el sexismo y el racismo como principales fuentes de desigualdad social.
  • Feminismo socialista: También llamado feminismo marxista, se trata de una crítica que unifica al capitalismo con el patriarcado como principales fuentes de desigualdad social. Estudia las relaciones de género y clase social desde una perspectiva marxista y socialista de los problemas de género.
  • Feminismo poscolonial: Se trata de un feminismo no-occidental, es decir, de una perspectiva de género que incluye las problemáticas y posturas propias del feminismo más allá de la cultura europea, involucrando el feminismo en Latinoamérica, Oriente y el resto de las regiones del mundo. Además, estudia el impacto del colonialismo europeo sobre la realidad social, étnica, de clase y género en los países postcoloniales.
  • Feminismo cultural: Se trata de una rama que establece la existencia de una «naturaleza femenina» y una «naturaleza masculina». Desarrolla teorías orientadas a establecer diferencias innatas entre el hombre y la mujer. La expresión «feminismo cultural» surgió como una crítica desde posiciones radicales o socialistas que cuestionaron las posturas naturalistas de ciertos grupos asociados al feminismo, los cuales reivindicaban las bases biologicistas de concebir el género.
  • Feminismo queer: Se trata del feminismo que integra al movimiento LGBTQ+ e incluye la lucha de las mujeres a la lucha de todas las disidencias sexuales en sentido general. El feminismo queer se basa en la idea de que toda identidad o concepción marginal de la sexualidad debe ser entendida como parte de una misma lucha integrada y compartida. El transfeminismo forma parte de esta corriente y se destaca por tematizar los derechos trans y la transexualidad como parte importante del movimiento.
  • Feminismo ecofeminista: También «ecofeminismo», se trata de la integración del feminismo, el ecologismo y el especismo como partes de un mismo movimiento que relaciona género y medio ambiente. Según el ecofeminismo, tanto el ecocidio como el femicidio están atravesados por la misma violencia del sistema patriarcal. La violencia que ejerce el hombre sobre la mujer es la misma violencia que ejerce el hombre sobre el ambiente, el ecosistema y el resto de las especies.
Variantes del feminismo
Las diversas formas de feminismo contribuyen a la diversificación del movimiento

Principales autoras y pensadoras del feminismo.

  • Mary Wollstonecraft (1759-1797): Escritora y filósofa inglesa considerada una de las figuras más destacadas del primer feminismo y la lucha por la emancipación de la mujer. En su obra Vindicación de los derechos de la mujer (1792) argumenta que las mujeres no son por naturaleza inferiores al hombre, sino que dicha diferencia se establece debido a que hombres y mujeres no reciben la misma educación y existen privilegios sociales en favor de los hombres. Estableció las bases del feminismo liberal e ideó una sociedad basada en la razón, a partir de la cual hombres y mujeres deben ser considerados como seres racionales. Una de sus frases más célebres: «No deseo que las mujeres tengan poder sobre los hombres sino que tengan más poder sobre sí mismas».
  • Simone de Beauvoir (1908-1986): Filósofa y escritora francesa, su obra El segundo sexo (1949) es considera una de las obras fundamentales en la historia del feminismo. En esta obra, Beauvoir sostiene que el concepto de «mujer» es una construcción social que ha sido definida, a lo largo de la historia, no en sí misma, sino en relación al hombre en su rol de madre, hija, esposa o hermana. Así, las características que definen la «identidad femenina» no devienen de la biología o la genética sino de cómo las mujeres fueron educadas y formadas en la sociedad para cumplir con determinados roles subalternos a la figura masculina. Su célebre frase «No se nace mujer, se llega a serlo» resume este pensamiento fundamental del pensamiento feminista.
  • Ángela Davis (1944): Filósofa, escritora y activista estadounidense afrodescendiente es una de las pensadoras y políticas más destacadas del feminismo contemporáneo. Su obra Mujeres, raza y clase (1981) es considerada una de las obras más importantes del feminismo interseccional. Davies desarrolla un feminismo antirracista y anticlasista incorporando conceptos del marxismo para establecer una crítica teórica a la violencia interseccional ejercida por el sistema patriarcal, capitalista y heteronormativo. Su activismo político y su compromiso con la lucha contra la discriminación en todas sus formas la convirtieron en una referente internacional no sólo del pensamiento y activismo feminista sino también de la lucha contra la discriminación racial, étnica y la desigualdad de clase en la sociedad capitalista.
  • Judith Butler (1956): Filósofa y escritora estadounidense, sus aportes al feminismo, la filosofía política y la ética se cuentan entre los más importantes de pensamiento feminista contemporáneo. Es una de las principales desarrolladoras de la teoría queer y es considerada una de las voces más destacadas de la teoría política contemporánea y la teoría de género. Autora de obras fundamentales como El género en disputa: Feminismo y la subversión de la identidad (1990) y Cuerpos que importan: Sobre los límites materiales y discursivos del género (1993), Butler desafía los conceptos tradicionales del género y elabora su teoría de la performatividad del género. Según Butler, la noción de «género» responde a una construcción naturalizada a partir de los cánones de la heteronormatividad hegemónica de los sistemas epistémicos patriarcales. Su obra constituye una crítica al sistema binario-masculino heteronormativo y la búsqueda de un desarrollo filosófico y teórico propio de las disidencias sexuales.
  • bell hooks (1952-2021): Escritora y activista social estadounidense, bell hooks adoptó su nombre de su bisabuela materna Bell Blair Hooks, su escritura en minúscula se debe a una elección propia de intervenir críticamente sobre el lenguaje como ejercicio político. Su principal centro de actividad y pensamiento fue la interseccionalidad de género, raza y clase a la cual describió como la acción sistemática de producir y perpetuar modos de opresión y dominación que atraviesan todas las formas de marginación, violencia y discriminación social. Según hooks, la interseccionalidad se expande a todas las áreas de marginalidad y discriminación (género, clase, etnia) y las elabora en un sistema que se perpetúa y legitima a través del tiempo. Publicó más de 40 obras dedicadas a estudiar críticamente las cuestiones relacionadas al género, etnia y clase en la educación, la política, el arte, la historia, la sexualidad y los medios de comunicación.
Filósofas
Las obras de las diversas escritoras y pensadoras del feminismo han contribuido al desarrollo de los estudios de género

Teoría queer.

La teoría queer es un campo de estudio surgido alrededor de 1990 a partir de la teoría crítica y la teoría feminista, en el marco de la elaboración de las políticas y consideraciones respecto a la diversidad sexual. Es una teoría que se orienta principalmente a la crítica del naturalismo de género y de la concepción binaria tradicional, desarrollando perspectivas más amplias (no heteronormativas) de género y diversidad.

Según los desarrollos de la teoría queer, el «género» no es algo estático y biológicamente determinado sino que es el resultado de un complejo entramado social y cultural en constante tensión y movimiento. Las diversas identidades sexuales no son «naturales» sino que se desarrollan como construcciones sociales dinámicas, fluidas, plurales y continuamente cambiantes.

La teoría queer cuestiona y rechaza los conceptos de identidad sexual basados en categorías fijas y universales como los de «varón», «mujer», «homosexual», «heterosexual», «bisexual», «transgénero» o «cisgénero», ya que estas están determinadas por la cultura heteronormativa o heteropatriarcal como centro epistemológico de referencia. Desde la perspectiva queer, estas categorías son ficcionales y se construyen en función de un conjunto de intereses políticos que son funcionales al sistema heteronormativo de hegemonía sexual, basado en la sexología como ciencia acrítica de pensar la sexualidad en el marco de una sociedad patriarcal hegemónica.

En oposición a la categorización heteronormativa, la teoría queer no construye ningún estereotipo de género ni define ninguna identidad sexual de forma estática y fija. Por el contrario, se ocupa de cuestionar las estructuras establecidas por la etiqueta hegemónica a partir de la deconstrucción y la teoría postestructuralista como marcos teóricos para desarticular las definiciones clásicas de género. En lugar de establecer categorías estáticas como las de «heterosexualidad», «homosexualidad», «bisexualidad» o «asexualidad», la teoría queer opta por el concepto de género fluido o género no binario. Según estas perspectivas, la identidad sexual no se define según el método hegemónico sino que se concibe a la sexualidad desde un carácter fluido, dinámico y abierto.

Temáticas fundamentales de la teoría queer.

  • Lenguaje inclusivo.
  • Derechos trans.
  • Matrimonio igualitario.
  • Crítica a los estereotipos de género.
  • Educación de género y diversidad sexual.
  • Deconstrucción y postestructuralismo.
  • Performatividad de género.
  • Historia LGBT+.
Teoría queer
La teoría queer plantea una deconstrucción radical de los estereotipos de género tradicionales

Citar este artículo

Aci, E. M. (7 de julio de 2024). Definición de estudios de género. Historia, temáticas, feminismo, teoría queer y estudios LGBTQ+. Definicion.com. https://definicion.com/estudios-de-genero/