El origen del término doctrina lo hallamos en el vocablo del latín doctrīna, cuyo significado es, esencialmente, ciencia. De esta manera, y en la actualidad, el vocablo se utiliza para englobar todo el conjunto de ideas de diversa índole (política, filosófica, religiosa) que una o más personas sostienen.

Aquí trataremos de presentar algunas características generales, un panorama amplio del concepto y algunas particularidades. ¡Comencemos!

Máquina de escribir
La doctrina o las doctrinas tienen que ver con la producción de ideas, o la construcción de un sistema de ideas, gracias al cual se presenta una forma de considerar un aspecto de la realidad, valores relacionados con él, y otros aspectos.

Doctrina en Derecho.

Para comprender la relación entre estos dos conceptos hay que partir por el segundo. Hay fuentes históricamente legitimadas que han funcionado como bases para las diferentes reglas y normativas (que, eventualmente, se pueden volver leyes) con las cuales una sociedad se guía. En este sentido, la principal fuente de derecho será la norma superior a todas, es decir, la Constitución: es el pilar de todo el sistema jurídico y la que permitirá el surgimiento de otras legislaciones.

La doctrina, en este sentido, es otra de las fuentes de derecho. Si bien no todos los sistemas jurídicos le otorgan la misma validez, su importancia radica en que está compuesta por las diferentes ideas u opiniones de los expertos que contribuirán con que se pueda crear, a futuro, una base sólida de cómo entender los aspectos de esta disciplina.

Hay un nombre más específico para esta práctica: doctrina jurídica. Se la conoce, entonces, como una metodología de trabajo que es, de cierto modo, cómo se interpretan los textos del derecho.

Mazo judicial.
En Derecho, la doctrina tiene que ver con cómo se consideran, a lo largo del tiempo, las diferentes legislaciones. Es un modo de «unificar» criterios para resolver situaciones con características similares de igual manera.

Doctrina cristiana.

Lo que se denomina cotidianamente doctrina cristiana, o católica, tiene que ver con el conjunto de saberes, reglas, principios y valores con los cuales tanto la Iglesia como sus creyentes se rigen. Son todas aquellas ideas en las que creen y que aquí describiremos brevemente.

La base de este saber tiene la revelación como fuente de conocimiento. Algunos pilares fundamentales de esta doctrina son los siguientes:

  • Hay un solo Dios, a diferencia de lo que ocurre con otras religiones. Él es quien, durante siete días y siete noches, construyó el mundo en todos sus aspectos. Es, de esta manera, también el creador del primer hombre, Adán, y la primera mujer, Eva.
  • Si bien Dios es uno solo, su figura existe o se manifiesta, al mismo tiempo, en tres seres que serán denominados Padre, Hijo y Espíritu Santo.
  • Hay dos aspectos fundamentales del hombre y sus características: que fue creado a imagen y semejanza divina, y que todos nacemos con el pecado capital. Esto último tiene que ver con que la humanidad toda nacerá con tal pecado, ya que Adán y Eva (más específicamente ella) desobedecieron la orden de Dios de no comer una manzana, fruto del árbol del conocimiento.
Biblia católica
La doctrina cristiana comprende múltiples principios, valores y perspectivas sobre el mundo, la relación entre creyentes con los valores y con Dios.

Doctrina política.

La idea de doctrina política remite, en principio, a las agrupaciones (por ejemplo, partidos) y a las maneras en que variarán unas respecto a otras, ya sea una diferencia entre doctrinas o posturas, pero también al interior de tales movimientos.

Quizás una de las formas en que tradicionalmente se distinguen unas de otras es la distinción entre la derecha y la izquierda. Hoy en día, tal división no siempre es tan clara y en muchas ocasiones simplifica debates, problemáticas y posturas que exceden esta clasificación.

Algunos de los tópicos centrales a partir de los cuales pueden establecerse múltiples distinciones entre doctrinas políticas tienen que ver con ciertas posturas referidas a los siguientes temas:

Cómo se considera el rol del Estado.

Si debe intervenir y regular, o ubicarse en un segundo plano. Algunas doctrinas, incluso, proponen su abolición.

La relación con el medio ambiente.

Determinadas perspectivas permiten poner en agenda los debates actuales acerca del cambio climático, de los efectos nocivos de diferentes prácticas y de su impacto, actual y a futuro, en la vida de las personas y en su salud. Otras posturas eligen no tener en cuenta esto, ya que de cierto modo se consideran inevitables tales efectos, o no indispensables, para un debate.

Posturas acerca de la propiedad privada.

Este concepto puede funcionar a modo de «paraguas» pues muchas veces incluye otros debates dentro de sí para argumentar una postura a favor o en contra. De la mano de la protección de la propiedad privada, muchas veces, viene incluida la idea de portación de armas en civiles (como ocurre en países como Estados Unidos, que tiene pocas restricciones al respecto) lo cual, llegado el caso, también toca el tema sobre la justicia por mano propia. Si se dispara contra alguien que ingresa a nuestra propiedad, o si se lo deja en poder de la policía, es otro de los aspectos que aquí necesariamente se abordarán.

Doctrina filosófica.

Doctrina de Platón
Platón sostiene una doctrina acerca de la verdad y la realidad.

En este punto nos encontraremos con una serie de planteos teóricos que, en función de la época, el lugar y las bases socioculturales de una comunidad, darán paso a un conjunto de saberes y propuestas específicas. Estarán relacionadas con los valores, con cómo se desarrolla la vida entre sus ciudadanos y las reglas que regirán tales intercambios.

Hablamos aquí de las doctrinas filosóficas, entonces. «Filosofía», cuyo origen está en el vocablo griego φιλοσοφία, significa «amor por la sabiduría» (philos es «amor» y sofos es «sabiduría»).

Describiremos a continuación algunas de las principales doctrinas filosóficas y sus especificidades:

  • Idealismo: Son las teorías y corrientes que indican que la percepción de la realidad (y, por lo tanto, el acceso al conocimiento) viene a los hombres a través de las ideas. Tal consideración de que la razón es la manera de acceder a la realidad proviene de Platón, y esto es explícito con su alegoría de las cavernas.
  • Estoicismo: Esta corriente o doctrina considera la virtud como un fin, no un medio, mediante la cual se puede acceder al dominio de las pasiones. La felicidad del hombre procede de este control del ánimo y del carácter, por lo que se opone profundamente al hedonismo. La palabra proviene de «estoico», del griego Στωικος, stoikos, que alude a stoa, parte de la arquitectura de lugares como el ágora donde los filósofos y pensadores se reunían.
  • Racionalismo: El racionalismo, de modo semejante al idealismo, pone por encima de la experiencia a la razón. Lo empírico, aquello a lo cual podemos llegar mediante las experiencias, aquí no tiene validez como fuente de saber. Sus inicios se atribuyen históricamente a Descartes (cogito, ergo sum, es decir, «pienso, luego existo»), y es una de las metodologías que se consideró válida para acceder al conocimiento científico y para sentar las bases de ello.
  • Positivismo: A diferencia del idealismo y el racionalismo, esta doctrina filosófica pone en primer lugar a la experiencia como medio gracias al cual se puede adquirir conocimiento y saber sobre el mundo que nos rodea. La manera de darle valor a este tipo de experiencias se relaciona estrechamente con el conocimiento científico en general, y con la comprobación en particular: sin una comprobación que sustente las posturas propuestas, no hay validez.

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Fernández, A. M. (21 de marzo de 2022). Definición de doctrina. Características, enfoques y ejemplos. Definicion.com. https://definicion.com/doctrina/