Definición de teoría de la mente

Se llama teoría de la mente a la capacidad cognitiva de inferir o interpretar el estado mental de otras personas mediante conjeturas, suposiciones o hipótesis. No se trata de telepatía o adivinación sino de una habilidad cognitiva que permite tener conciencia de la subjetividad del otro, a partir de intuir o deducir el contenido de sus pensamientos, intenciones o emociones. Esto significa que un sujeto inteligente que desarrolla una teoría de la mente tiene la capacidad de comprender y entender el estado mental de sí mismo y diferenciarlo del estado mental del otro y, a partir de allí, desarrollar conjeturas para intentar comprender la subjetividad ajena.

Del inglés «theory of mind» (ToM), la teoría de la mente se trata de una acción intuitiva y casi inmediata de interpretar estados mentales en los demás (pensamientos, creencias, deseos, emociones). La idea es predecir o decodificar la conducta, así como también regular y coordinar el comportamiento propio. Esta capacidad cognitiva es fundamental para la interacción social, ya que permite establecer relaciones con los demás y con el entorno. Sirve como válvula para desarrollar la adaptación y responder de manera coherente a las distintas situaciones y contextos.

Por ejemplo: si vemos a alguien reír podemos deducir que está feliz, si vemos llorar, deducimos que uno está triste. Inmediatamente nos representamos en nuestra mente una simulación mental que nos da la chance de empatizar con su felicidad o tristeza. Luego, según nuestras propias creencias y experiencias recreamos posibles circunstancias y escenarios para poder anticipar lo que puede suceder, porqué la persona está feliz o triste, cómo puede reaccionar o cuál será el siguiente movimiento. A esta capacidad de interpretar, intuir o deducir el comportamiento del otro se la conoce como teoría de la mente.

Así, la teoría de la mente es estudiada desde diversos enfoques y disciplinas como la psicología cognitiva, la psicología social, la neurociencia cognitiva y la filosofía de la mente. Es concebida como una habilidad cognitiva vinculada con la cognición social y la capacidad de la mente de percibir la subjetividad de los demás, más allá de sus propias ideas, pensamientos o creencias.

Uno de los principales investigadores que llevó adelante el estudio de la teoría de la mente fue el antropólogo, biólogo y psicólogo británico Gregory Bateson, quien comenzó a investigar los precedentes de la teoría de la mente analizando el comportamiento de los perros en el ámbito lúdico. Bateson advirtió que mientras dos canes jugaban a la lucha, existía en ambos cierta anticipación a los movimientos del otro y cierta capacidad de intuir si la lucha consistía en un juego o se convertía en un enfrentamiento real. A partir de esta observación, Bateson conjeturó que los perros desarrollan de forma intuitiva la teoría de la mente como un mecanismo propio de sus relaciones cognitivas con el entorno.

De manera que la capacidad de desarrollar la teoría de la mente no sólo es parte de la cognición humana, sino que también se extiende a los animales, e incluso a la inteligencia artificial. Bateson estableció que para que una mente sea capaz de desarrollar esta cualidad cognitiva debe estar vinculada a procesos como el aprendizaje, la atención, la memoria y la toma de decisiones.

La cognición social y la teoría de la mente.

La cognición es el conjunto de habilidades y procesos relacionados con la conciencia, la mente y el procesamiento de la información, tanto del entorno como de los estados mentales internos, en todos los niveles (intelectual, emocional y social). La ToM está estrechamente ligada a la estructura y las dinámicas cognitivas, ya que representa una porción fundamental del proceso de cognición humana. Especialmente, la ToM se asocia con lo que se conoce como cognición social, la cual se vincula con todas aquellas capacidades y habilidades cognitivas referentes a la interacción social, la comunicación y las relaciones interpersonales.

La cognición social incluye un complejo conjunto de relaciones cognitivas que involucran áreas tanto de la inteligencia cognitiva como la inteligencia emocional, en conjunción con las habilidades de comunicación y socialización. La ToM se enlaza con todas estas áreas de la cognición social como el procesamiento e interpretación de las emociones, la percepción social, el reconocimiento de las normas y reglas sociales, y la generación de respuestas en torno al comportamiento de los otros y del entorno social. A continuación apuntaremos algunas definiciones de las distintas habilidades cognitivas involucradas en la teoría de la mente:

• Inteligencia emocional: Consiste en el procesamiento, interpretación y reconocimiento de las emociones, tanto propias como ajenas. En el caso de las del prójimo, la inteligencia emocional se vincula con las cognición social para desarrollar la comprensión y reconocimiento no sólo de las emociones de uno mismo sino también de las emociones de otros. Habilidades como la empatía, el reconocimiento de la emocionalidad ajena y la comunicación de las emociones, representan habilidades básicas de la cognición emocional y social.
• Percepción y reconocimiento social: Se basa en la capacidad de reconocer e interpretar correctamente las complejas relaciones sociales, sus normas y reglas, e impulsar formas de respuesta positiva frente al entorno y la interacción social.
• Interpretación y atribuciones: Se caracteriza por la capacidad de interpretar el comportamiento ajeno a partir de atribuir razones para entender el comportamiento de otros individuos y las relaciones sociales.
• Empatía emocional y empatía cognitiva: Existen dos modalidades en las que se desarrolla la teoría de la mente como la capacidad de comprender, interpretar y predecir la conducta del otro. De manera cognitiva, es decir, intelectualmente, entendiendo las razones, causas y consecuencias de los actos, y de modo emocional, siendo capaces de desplegar empatía y considerar las causas y complejidades de las emociones ajenas.

Teoría de la mente en psicología evolutiva.

Desarrollo de la teoría de la mente en la infancia.

La psicología evolutiva estudia el desarrollo de la cognición, la mente y los procesos de aprendizaje desde la temprana infancia hasta la adultez.

Según diversas teorías en psicología del desarrollo y el aprendizaje, las capacidades cognitivas se generan a través de la activación de una cualidad congénita, natural en los individuos que, mediante la interacción social y la estimulación comunicativa con los otros, comienzan a desarrollarse las primeras manifestaciones de la mente y la cognición humana.

En las personas, las habilidades cognitivas empiezan a desarrollarse desde edad temprana. A partir de los 18 meses, los niños pueden leer e interpretar la mayoría de los estados mentales. A los 2 años están en condiciones de participar en el juego simbólico (capacidad de simular acciones mediante la imaginación). A los 3 son capaces de predecir los estados mentales e inferir emociones y situaciones contemplando al entorno social. Luego de los 4 años, los niños son capaces de desarrollar ToM y de diferenciar los conocimientos propios de los saberes ajenos. De los 4 años en adelante, los chicos despliegan procesos de inferencia más complejos, como la interpretación de los deseos y creencias del otro, la elaboración de hipótesis y el análisis de las posibles causas y efectos de los acontecimientos.

Para poder de elaborar la teoría de la mente, es preciso que el chico adquiera un conjunto de habilidades cognitivas básicas que son fundamentales para el posterior desarrollo de la cognición social, como la imitación, la imaginación, el reconocimiento de emociones y la intencionalidad del otro y la capacidad de elaborar representaciones mentales, entre otras. Estas habilidades se van adquiriendo en edades tempranas y generan las condiciones para el surgimiento de destrezas más complejas que serán la base del desarrollo del pensamiento y la intuición social. La teoría del a mente comienza a dominarse a partir de los 4 años de edad como un proceso complejo sobre la base de estas habilidades cognitivas básicas.

Prueba de la falsa creencia.

Del inglés false belief test (prueba de la falsa creencia) es un experimento que se utiliza para evaluar el desarrollo de teoría de la mente en los más pequeños. Esta prueba sólo puede solucionarse si el niño es capaz de diferenciar los conocimientos propios acerca del entorno de los de la otra persona. Existen muchas variantes del desafío, pero su base fundamental consiste en mostrar a los infantes una situación en la cual alguien guarda un objeto determinado en una caja. Luego, dicho ser se retira a y entra otro sujeto que toma el elemento de la caja y lo guarda en otro lugar (una mochila, bolsa u otro recipiente). Una vez mostrado este panorama se le pregunta al chio lo siguiente: Si la primera persona vuelve ¿Dónde iría a buscar el producto? Si contesta que iría a la caja inicial significa que es capaz de reconocer que la primera persona no tiene el mismo conocimiento que él, ya que no fue testigo de toda la escena y, por lo tanto, creería que el objeto nunca cambió de sitio. Por el contrario, si responde que el sujeto iría a la segunda caja significa que aún no puede diferenciar los conocimientos propios de los saberes del otro y, por ende, aún no ha desarrollado la teoría de la mente.

Generalmente, los menores de 4 años no suelen superar la prueba de la falsa creencia porque aún creen que la primera persona tiene la misma información que ellos. No obstante, los mayores de 4 años son capaces de responder correctamente, lo cual significa que han desarrollado teoría de la mente y que han pasado a una etapa cognitiva en la cual se supera el egocentrismo infantil de los primeros tiempos. El fallo en la prueba de falsa creencia también es un indicador para detectar casos de trastorno del espectro autista (TEA), ya que el autismo está vinculado con el déficit en la ejecución de la teoría de la mente, la representación mental y las habilidades de cognición social.

Otras pruebas y test para evaluar la teoría de la mente.

• Reconocimiento de las expresiones faciales: Se basa en una prueba a través de imágenes de gente con diferentes expresiones faciales, en donde se evalúa la capacidad de interpretación de las emociones de los otros a partir de sus gestos y expresiones faciales.
• Test de los ojos y la mirada: Consiste en un test similar al de las expresiones faciales pero utilizando sólo el rango de los ojos, con el fin de probar la capacidad de inferencia de los estados mentales a partir del indicio de las miradas, la posición y expresión de la vista.
• Test de los dilemas morales: Gira en torno a una prueba que trata de plantear un conjunto de dilemas éticos y morales con el fin de probar la cognición moral y el desarrollo moral de los individuos a partir de su capacidad para analizar situaciones problemáticas y establecer juicios éticos.
• Test de literalidad: También llamado «test de las historias extrañas», es una prueba que trata de plantear un conjunto de historias en las cuales los personajes no se expresan de forma literal, sino a través de metáforas y doble sentido con el fin de evaluar la capacidad de interpretación de la ironía, la metáfora o la mentira en los individuos.
• Test de las normas sociales: Consiste en un test a partir de una serie de historias cortas en las cuales alguien da una respuesta determinada a otra. La prueba ofrece tres finales posibles para los relatos: uno de situación absurda o embarazosa, otro en el que una de las personas incumple con una norma o falta el respeto a la otra, y un final normal. Se debe decidir cuál será el desenlace para dicha historia. En esta acción se evalúan la capacidad de reconocer normas sociales y de leer circunstancias de conflicto y sus posibles desenlaces.

Autismo, asperger y teoría de la mente.

El desarrollo infantil de la cognición depende, en gran medida, del entorno social, el nivel de estimulación y la calidad educativa desde la temprana infancia. La falta o déficit de una red social que estimule al niño a tener una perspectiva cognitiva sana y desarrollar el procesamiento de información social, puede tener un impacto negativo en su desarrollo cognitivo, emocional y social. Trastornos del desarrollo y el aprendizaje como el autismo o el Asperger están vinculados a una deficiencia en el desarrollo de la teoría de la mente y las habilidades cognitivas básicas que permiten el aprendizaje social. El déficit de ToM en niños con autismo o trastorno del aprendizaje indica que las dificultadas en la socialización, comunicación y reconocimiento del entorno social están asociadas a una incapacidad de atribuir y representar estados mentales.

Tanto el autismo como el Asperger son trastornos que se caracterizan por un déficit en las habilidades de comunicación, representación mental y reconocimiento social. No obstante, respecto al origen de este tipo de disfunciones de la cognición social y otras habilidades cognitivas básicas, las investigaciones realizadas aún no son concluyentes, pero todas coinciden en la multicausalidad de factores (biológicos, psicológicos y sociales) que llevan a desarrollar TEA o Asperger en la infancia.

Teoría de la mente en la neurociencia.

En el ámbito de la neurología, los expertos describen al cerebro como un órgano especializado en interpretar y predecir la realidad. Una suerte de «máquina predictiva» cuyas funciones y conexiones neuronales están orientadas a producir modelos mentales para leer, interpretar y predecir el entorno con el fin de brindar herramientas de adaptación y respuesta a las diferentes situaciones y contextos. En este sentido, los progresivos avances en las neurociencias y las tecnologías aplicadas al estudio del cerebro y la neurología, como la neuroimagen funcional, permiten a los neurólogos estudiar la geografía cerebral y los procesos neuronales que intervienen en el procesamiento de la información y el desarrollo de la teoría de la mente.

Los especialistas llaman «cerebro social» a aquellas partes del cerebro que intervienen en las interpretaciones y respuestas en relación al entorno social, como la comunicación, el lenguaje y los procesos de reconocimiento de emociones, gestos y comportamientos ajenos. En este marco, la ToM es estudiada desde estas áreas cerebrales en las que intervienen neuronas específicas en el procesamiento de la información social y de la interacción con el entorno, como la inteligencia emocional y social, las creencias de primer y segundo orden, la empatía, el uso social y comunicativo del lenguaje y el comportamiento social.

Teoría de la mente y neuronas espejo.

La neuronas espejo son un tipo de neuronas que reflejan las acciones realizadas en el cerebro, a modo de imitación o representación mental de las acciones. En el cerebro humano, la acción y la representación no están separadas en sectores distintos e independientes, sino que forman parte de la misma corteza cerebral. Por ejemplo: Cuando vemos a una persona tomar una manzana sin nosotros haber realizado directamente la acción, en nuestro cerebro se activan las mismas neuronas psicomotoras como si nosotros mismos estuviéramos sujetando la fruta de forma directa. De modo que las neuronas espejo están vinculadas con habilidades cognitivas como la imitación, la representación, la empatía, la atribución de pensamientos e intencionalidad y, por ende, con la capacidad de desarrollar ToM.

Las neuronas espejo fueron descubiertas por el neurobiólogo italiano Giacomo Rizzolatti en 1996 debido a una casualidad. Rizzolatti se encontraba estudiando el cerebro de los primates, a los que había conectado electrodos en la corteza premotora, zona en la que se dan las conexiones vinculadas al movimiento y la acción corporal. Mientras monitoreaba el cerebro de los primates, Rizzolatti notó que las neuronas psicomotoras del mono se activaban cuando el investigador tomaba una banana, es decir: sin que el primate estuviera en movimiento, en su cerebro se activaban las mismas neuronas relacionadas con el movimiento de las manos y el gesto de tomar objetos. De esta manera, Rizzolatti se dio cuenta de que cuando observamos una acción se activa la misma parte de nuestro cerebro de cuando realizamos dicho acto. A partir de las neuronas espejo es posible interpretar, comprender y anticipar mejor las acciones ya que, de alguna manera, el cerebro imita la acción como si la estuviera experimentando directamente. A las neuronas que permiten esta capacidad cerebral de imitación motora se las denominó «neuronas espejo».

Teorías cognitivas vinculadas a la teoría de la mente.

• Teoría del apego: Es una teoría desarrollada por el psicólogo y psiquiatra británico John Bowlby que estudia la importancia de las relaciones afectivas en la primera infancia y cómo estas afectan al desarrollo cognitivo y social de las personas. Según la teoría del apego, el contacto afectivo en la primera infancia es de vital importancia para el desarrollo futuro de habilidades cognitivas, sociales y emocionales. La falta o déficit de afecto en los niños durante su etapa prematura perjudica considerablemente el desarrollo de habilidades cognitivas básicas como la inteligencia emocional y social, la inteligencia cognitiva, la adquisición del habla, el uso social del lenguaje y la capacidad de establecer vínculos.
• Teoría de sistemas dinámicos: Es una amplia teoría surgida originalmente del campo de las matemáticas, pero aplicable a muchas áreas en las cuales se emplean sistemas complejos. En el caso de la ToM, la teoría de sistemas dinámicos se aplica para estudiar el desarrollo cognitivo en los niños, a partir de la construcción progresiva de sistemas dinámicos cognitivos cada vez más complejos a lo largo del tiempo.
• Teoría del comportamiento: Es una teoría surgida del campo de la administración y estudia cómo surgen las relaciones humanas en un contexto laboral y administrativo. Se relaciona con la ToM en aquellos aspectos que evalúan las capacidades para comprender y responder a las distintas interacciones sociales.
• Teoría de la identidad social: Es una teoría propia del campo de la psicología social que estudia el comportamiento social humano a partir de la identificación con el entorno y los diversos grupos sociales de pertenencia. Se relaciona con la ToM en aquellos aspectos que involucran las capacidades de cognición social relacionadas con la psicología de grupos, la dinámica de grupos y la influencia social en los individuos.
• Teoría de la elección racional: También llamada teoría de la acción razonada, estudia el comportamiento social en relación a la tesis de que los individuos tienden a maximizar su beneficio y a reducir los costos o riesgos. Es empleada en el campo de la microeconomía y se relaciona con la ToM en aquellos casos en que se estudia la capacidad de leer, predecir y anticiparse a los cambios económicos y sociales, para aprovecharlos en favor del individuo.
• Teoría del efecto espectador: Es una teoría que estudia el comportamiento social humano ante una situación de crisis o conflicto. La teoría del efecto espectador establece que los humanos tienden a no intervenir en episodios de conflicto cuando hay más personas que cuando se está sola. Se relaciona con la ToM en aquellas capacidades para leer, interpretar y reaccionar ante los distintos estímulos sociales.

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Aci, E. M. (13 de enero de 2024). Definición de teoría de la mente. Características, desarrollo y habilidades cognitivas. Definicion.com. https://definicion.com/teoria-de-la-mente/