Crecimiento personal es la denominación para aquel proceso individual, subjetivo y que consiste en un camino de autoconocimiento, superación de obstáculos y fortalecimiento de la inteligencia emocional.

Es un concepto que ha cobrado una gran relevancia en los últimos años, ya que permite visibilizar cómo nuestro propio empoderamiento, mediante herramientas y técnicas que nos hagan ser más conscientes de nosotros mismos.

Características.

Algunas de las características generales del crecimiento personal es que constituye el proceso mediante el cual podemos emprender un proceso de transformación y de autodescubrimiento de una persona. De este modo, es posible salir de nuestra zona de confort, delinear objetivos personales, profesionales, y emprender un camino de exploración de una nueva motivación.

Motivación y logros
El trabajo de crecimiento personal nos ayuda a poder enfocarnos en el presente, en poder mirar al futuro y construir objetivos que nos motiven día a día

Este trabajo puede realizarse con acompañamiento profesional, de modo tal que nuestro terapeuta puede acompañarnos en el proceso de aprender sobre la toma de decisiones, sobre la comunicación efectiva de emociones y, también, a fortalecer nuestra escucha activa.

Sin embargo, cabe destacar que el crecimiento personal no es una herramienta para lograr la validación externa, o mantener nuestro estatus en nuestro entorno o, más aún, adquirir más posesiones y bienes. La acumulación de saberes y de conocimiento no nos define como personas y nuestros logros (personales, profesionales o académicos), que muchas veces se combinan con el deseo de éxito, tampoco se relacionan con este proceso.

Finalmente, esta forma de viaje interior, que implica también cuestionarse a uno mismo, no es un proceso lineal, con un fin específico o que tiene lugar de forma estática. Podemos desarrollarlo a lo largo de nuestra vida, en ocasiones con mayor intensidad y conciencia y, en otras, aplicando las herramientas aprendidas casi sin darnos cuenta.

Pilares.

Exploraremos a continuación algunos pilares del crecimiento personal.

Desarrollo mental y cognitivo.

El cultivo de un pensamiento crítico y la eliminación de creencias limitantes son dos grandes ejes al momento de iniciar el camino del crecimiento. Nos permite enfrentar miedos, muchas veces muy propios, otras veces propios de una vida en sociedad, y adquirir mayor flexibilidad cognitiva para adaptarnos, para practicar la resiliencia y para la reinvención personal.

Construcción de autoestima
Nuestro crecimiento interno y externo está fuertemente influenciado por nuestras creencias y la superación de limitaciones.

Así, también es posible que, si tenemos dudas o no sabemos cómo abordar este camino inicialmente, aprendamos que es importante saber pedir ayuda: a amigos, a familiares, a un terapeuta.

Con este incentivo a nuestro desarrollo personal, podemos aprender a valorar el presente, a soltar el pasado, a perdonar y perdonarnos y, también, a poder darle paso a la planificación de futuro y las metas que queremos lograr.

Desarrollo espiritual.

En el desarrollo espiritual de nuestro crecimiento personal podemos aspirar a una conexión con el yo superior o incluso una conexión con el universo o algo más grande. Si bien esto no se restringe a la práctica de una religión, por ejemplo, sí es muy útil como parte de nuestra construcción de comunidad con otros, que emprenden un viaje similar al nuestro, que nos haga sentir identificados y parte de un grupo.

Podemos desarrollar la espiritualidad desde la conexión con la naturaleza, la participación en talleres y seminarios o tomar cursos y formación continua en algún tipo de saber que deseemos construir. El cultivo de la paz interior, última meta del desarrollo espiritual, es una gran herramienta para el crecimiento.

Desarrollo físico.

El plano físico, de nuestro cuerpo, muchas veces es dejado de lado en filosofías que involucran un cambio en nuestra forma de pensar, o en la búsqueda de reconfigurar nuestros hábitos. Es muy importante también priorizar nuestra salud física, y entender que la incorporación de hábitos saludables, así como una reflexión introspectiva sobre qué comemos y cómo, cuándo descansamos y cómo invertimos nuestro tiempo libre es esencial para un equilibrio entre cuerpo y mente. 

Descansar
El descanso, así como una alimentación saludable, son importantes para poder tener movimientos desestresantes.

La atención a una nutrición consciente ees también una forma de autocuidado, que nos ayuda a descansar mejor y a sentirnos con mejor ánimo gracias al consumo de alimentos saludables. Su combinación con ejercicio y actividad física son esenciales para mantener un sistema cardiovascular activo, que nos permita despejar nuestra mente por unos minutos al día.

Técnicas.

Algunas herramientas útiles que pueden acompañar nuestro proceso de crecimiento personal son:

  • Mindfulness (atención plena): la práctica de la atención plena es útil para trabajar la conciencia sobre nosotros mismos, nuestro cuerpo, nuestra mente, y fundamentalmente para poder anclarnos en nuestro presente.
  • Desarrollo de habilidades o desarrollo de talentos: trabajar en una nueva habilidad o explorar un viejo talento nos ayuda a fortalecer nuestra mente, ya que nos enfrentamos a un nuevo reto, nos permite conocer nuevas personas, fortalecer nuestros vínculos, y también puede ser útil para trabajar la autodisciplina de forma menos estructurada, sin la presión de tener que cumplir expectativas más que las propias.
  • Viajes y experiencias culturales: estos nos ayudan a conectar con nuevas culturas, nuevos lugares, otra gastronomía y a expandir nuestra visión del mundo. También, nos fuerza a aprender a ser resilientes, a resolver problemas imprevistos, a encontrarnos con un nuevo universo de lenguas, pensamientos y formas de vivir, y nos permite trabajar intensamente nuestra propia autoestima e identidad.
  • Journaling (escritura reflexiva): cuando podemos depositar nuestros pensamientos, y leerlos, no solo potenciamos la autoexpresión y la validamos al permitirnos escribir lo que sentimos y pensamos, sino que tenemos un registro más o menos ordenado de qué nos sucede, qué aprendemos y cómo registramos nuestras experiencias. Es un espacio seguro, donde podemos sentirnos libres con nosotros mismos, y es muy útil para disminuir los niveles de estrés.

Obstáculos y beneficios.

El camino del crecimiento personal es largo y dinámico, siempre cambiante. Por este motivo, es posible encontrar algunos elementos que nos ahuyenten de seguir adelante o de continuar profundizando en estas experiencias transformadoras.

Gestión y planificación
Podemos incorporar pequeños hábitos hacia nuestras metas mediante la planificación diaria y la gestión de nuestra agenda

Algunos obstáculos en este proceso son la falta de establecimiento de límites, la imposibilidad de tener una buena gestión del tiempo (productivo y laboral) y la falta de visión a largo plazo.

Cuando podemos trabajar nuestra responsabilidad personal, y aprender sobre establecimiento de rutinas, podemos evitar la procrastinación para poder construir un balance entre tiempo de trabajo y tiempo libre, de descanso, y no tener ritmos de trabajo altamente demandantes.

Por otra parte, cuando aprendemos a dominar esta parte de nosotros, es inevitable en algún momento la autocrítica. Es importante examinar qué hacemos, cómo invertimos nuestro tiempo y energía y empezar a dar paso a nuevos patrones, pequeños, que nos ayuden poco a poco a construir hábitos.

Con el paso del tiempo, este trabajo en pos de nuestro crecimiento personal nos hace aprender a vivir con mayor plenitud y satisfacción, por nuestros logros, nuestro compromiso y responsabilidad, y por las metas que poco a poco vamos alcanzando.

Citar este artículo

Fernández, A. M. (27 de noviembre de 2023). Definición de crecimiento personal. Rasgos, pilares y técnicas. Definicion.com. https://definicion.com/crecimiento-personal/