El determinismo es una postura filosófica que afirma que todo acontecimiento o fenómeno está dado por un orden preestablecido y los hechos suceden necesariamente de una forma predeterminada. Según el determinismo, no existe el azar, la libertad o el libre albedrío, sino que todo está determinado por una ley o necesidad causal. Así, el determinismo establece que la causalidad, es decir, las leyes de causa y efecto están predeterminadas y todo sucede según un «orden necesario».

En el plano de la acción humana, el determinismo se opone al libre albedrío y afirma que la libertad es imposible, ya que su comportamiento y la toma de decisiones está determinada por factores que van más allá del control humano. Según el determinismo, la idea de libertad o azar surge del desconocimiento del «orden establecido».

Existen muy diversos tipos de determinismo según el nivel y el ámbito en el que se aplique el concepto. Así, el determinismo físico opera sobre el campo de la física y afirma que no existe el azar en las leyes de la naturaleza. En palabras de Einstein, «Dios no juega a los dados con el universo», las cuales pronunció en contra de la teoría de la mecánica cuántica que postula un indeterminismo en el movimiento de las partículas. Otros ejemplos de determinismo pueden ser: determinismo teológico, determinismo biológico o determinismo social.

El mecanicismo es un tipo de determinismo basado en la idea de que en la naturaleza rige un orden mecánico. Según el mecanicismo, la naturaleza es como una gran máquina donde cada parte tiene una función y propósito determinado que establece y ordena todos los movimientos del universo. El fatalismo es un tipo de determinismo relacionado al destino que afirma que la libertad humana no existe y que la voluntad no tiene el poder para cambiar los hechos, todo acontecimiento del destino de una persona está pre-destinado por el fatalismo.

Históricamente, el determinismo tiene una muy larga data en la cultura tanto occidental como oriental. Desde las primeras civilizaciones antiguas, se creía que la naturaleza y el destino de los hombres estaba signado por los dioses, los astros, o entidades superiores, que regían el destino de la humanidad y las personas. En la mitología griega, existían las denominadas moiras, diosas encargadas de tejer el destino de cada ser humano en la Tierra.

Etimológicamente, la palabra determinismo está compuesta por el prefijo de-, más la palabra base proveniente del latín terminare, que significa terminar, poner un límite o fin, y el sufijo –ismo, que hace referencia a una doctrina, postura o corriente de pensamiento.

Libre albedrío
El determinismo representa la negación del libre albedrío, al afirmar que todos los actos humanos están predeterminados por una fuerza más allá de la voluntad

Índice de temas

Breve historia del determinismo.

La historia del determinismo no responde a una historia lineal y concreta, sino que es una idea generalizada dentro de la cosmovisión y el sistema de creencias de las distintas culturas antiguas. Desde el inicio de la civilización, la idea de que el devenir de los hechos y el destino de las personas estaba preestablecido por un «orden superior», es una idea que la gran mayoría de las culturas antiguas expresaron como algo dado. Para los antiguos griegos, los dioses determinaban el destino de los hombres antes de nacer y encargaban a las moiras (diosas tejedoras del destino), que se ocuparan de tejer y vigilar que las personas cumplan con lo predestinado por los dioses. Incluso, existía el tabú de no contradecir al destino, ya que, según esta creencia antigua, todo hombre que intente cambiar su destino estaría en contra del designio de los propios dioses, esta acción se conocía como hybris (la desobediencia a los dioses) y era castigada con la tragedia.

Para la cultura grecorromana, la astrología era una de las ciencias más predilectas a la hora de hablar del determinismo del destino, no sólo de los hombres, sino también de los pueblos enteros. Se han hallado un gran número de cartas astrales hechas a gobernantes, emperadores y personalidades importantes de la antigüedad, las cuales demuestran que la idea del determinismo influenció en gran medida las decisiones de los gobernantes a lo largo de la historia. El determinismo astral fue de gran importancia, también, en culturas como Egipto, Sumeria, América y Oriente.

Astrología
El determinismo astrológico es la creencia según la cual el destino de las personas está determinado por los astros

Determinismo en la filosofía.

El determinismo filosófico, comprende un conjunto de diversas posiciones que han desarrollado el concepto de determinismo de distintas maneras a lo largo de la historia:

Los estoicos fueron los máximos representantes del determinismo antiguo. Según el estoicismo, las acciones humanas responden a un «plan predeterminado», el azar o la libertad humana no son posibles debido a que todo fenómeno, movimiento o acción está determinado por las condiciones y circunstancias en las que se produce, de manera que los actos de la voluntad no son libres sino preestablecidos.

David Hume habló del histórico problema entre determinismo y libertad y se refirió a él como un problema surgido de una ambigüedad causada por la idea del incompatibilismo que no se pudo resolver durante los últimos 2000 años. Hume, contrariamente a la oposición incompatibilista clásica, observó que el concepto de libre albedrío necesita del determinismo para tener sentido, ya que si pensáramos en un incompatibilismo absoluto entre libertad y determinismo, entonces los actos humanos serían pura y exclusivamente aleatorios, y por ende, seríamos incapaces de decidir. De esta manera, Hume logra concebir un compatibilismo entre ambos conceptos que históricamente fueron vistos como incompatibles.

Mecánica cuántica y determinismo.

La mecánica cuántica ha revolucionado la comprensión del determinismo en el contexto científico. A diferencia de la física clásica, las teorías cuánticas postulan que los eventos a nivel subatómico no siguen un camino determinista claro. El principio de incertidumbre de Werner Heisenberg sugiere que no es posible conocer con exactitud tanto la posición como el momento de una partícula, lo que introduce un elemento de indeterminismo en el comportamiento de partículas. Este principio ha llevado a cuestionar la noción clásica de causalidad, proponiendo que en el mundo cuántico, las partículas pueden existir en varios estados a la vez, como lo ilustra el famoso experimento mental del gato de Schrödinger. La superposición y el entrelazamiento cuántico desafían aún más las nociones tradicionales de la causalidad, sugiriendo que la observación misma puede influir en el estado de las partículas, un fenómeno conocido como el «colapso de la función de onda». Estas ideas han dado lugar a un rico debate filosófico sobre el alcance del determinismo en la naturaleza.

Gottfried Wilhelm Leibniz desarrolló un compatibilismo teológico entre determinismo y libertad, según el cual la libertad humana y el libre albedrío fueron determinados por la voluntad de Dios, de manera que la compatibilidad de Leibniz, busca superar el incompatibilismo y lograr unificar ambos conceptos opuestos a partir de una voluntad divina. Baruch Spinoza desarrolló la idea del panteísmo, según el cual la totalidad de los fenómenos de la naturaleza y la consciencia están determinados por un orden perfecto y matemático preestablecido por Dios. Thomas Hobbes, en su obra Leviatán, desarrolló un concepto mecanicista del determinismo, según el cual, las partes de un todo pueden separarse y ser explicadas a partir de la función que las determina con la totalidad.

Compatibilismo
El compatibilismo propone que el determinismo y la libertad no son necesariamente opuestos y pueden ser compatibles de múltiples formas

Immanuel Kant pensó un determinismo consecuente, en el que la causalidad tiene un aspecto objetivo irreductible y por ende las leyes físicas determinan el mundo de manera causal. Sin embargo, para garantizar la libertad de la acción humana y el libre albedrío, Kant establece un compatibilismo, en donde las condiciones exteriores al sujeto están determinadas por las leyes causales, pero su voluntad y su capacidad de decisión en base a la libertad de su razón, le permiten decidir y ser un sujeto libre en un mundo físicamente determinista.

Ciencia cognitiva y determinismo.

Los avances en la ciencia cognitiva y la neurociencia han reavivado el interés por el determinismo en el contexto del comportamiento humano. Estudios recientes han mostrado que decisiones conscientes pueden ser precedidas por actividad cerebral que es detectable segundos antes de que el individuo tome su decisión consciente. Este fenómeno ha sido interpretado por algunos investigadores como una evidencia de que nuestras elecciones están, en última instancia, determinadas por procesos neuronales inconscientes. Ejemplos de estos estudios incluyen experimentos de mapeo cerebral en los que se anticipa con cierto grado de certeza la decisión de un individuo antes de que sea consciente de ella. Este ámbito de investigación plantea preguntas fundamentales sobre el libre albedrío y la autonomía humana, cuestionando hasta qué punto nuestras decisiones son verdaderamente libres o si están predeterminadas por las condiciones cerebrales.

En el marco del idealismo alemán, Georg Wilhelm Friedrich Hegel enfatizó la importancia del concepto de libertad y estableció que el ser humano es libre en sí mismo y se autodetermina a partir de esta libertad propia de la naturaleza humana. Hegel desarrolla el concepto de autodeterminación, en el cual se unifican la libertad y el determinismo.

Análisis comparativo de filósofos.

Profundizando en las ideas de filósofos como David Hume, Baruch Spinoza e Immanuel Kant, se puede observar una rica diversidad en el tratamiento del determinismo y el libre albedrío. Hume argumenta por un compatibilismo cuidadoso, donde el determinismo es necesario para el libre albedrío, sugiriendo que sin un mundo ordenado, la libertad de elección sería ininteligible. Por el contrario, Spinoza adopta una perspectiva panteísta, donde todos los fenómenos son manifestaciones de una sustancia única, Dios, y están preordenados. Para él, la libertad es comprender la necesidad. Kant propone su «compatibilismo transcendental», distinguiendo entre el mundo fenoménico, donde las leyes de la naturaleza determinan los eventos, y el mundo noumenal, donde reside la libertad moral de los individuos. Esta distinción le permite a Kant afirmar que somos libres en un sentido moral, aunque vivamos en un mundo determinado físicamente.

Arthur Schopenhauer, en su escrito La libertad de la voluntad planteó que el sujeto humano está constituido por dos naturalezas contrarias: por una parte, es un fenómeno más entre los fenómenos físicos, y por ende, está determinado y condicionado por las leyes de causa y efecto; por el otro, el ser humano contiene en sí mismo la libertad de la voluntad que afirma su libertad de ser. De esta manera, Schopenhauer niega el libre albedrío y lo postula como una ilusión y lleva el concepto de libertad al plano metafísico de la voluntad.

Friedrich Nietzsche en su teoría del eterno retorno, habla de que todas las cosas están determinadas por una repetición cíclica y eterna, a partir de la cual todos los actos y acontecimientos de una vida se repiten en la siguiente, y las cosas vuelven a sucederse de la misma forma, una y otra vez. Esta vida ya fue vivida y cada acto de la vida humana ya está determinado y destinado a «repetirse eternamente».

Eterno retorno
Según Nietzsche, el eterno retorno de lo mismo determina la vida de manera cíclica y repetitiva

Tipos de determinismo.

Determinismo en las ciencias naturales.

Determinismo físico.

Es el determinismo aplicado a las leyes físicas de la naturaleza, según el cual las leyes naturales determinan y explican el orden, el movimiento y el sentido del universo y los fenómenos físicos. El determinismo físico es de suma importancia para el ámbito científico. Históricamente, Pierre-Simon Laplace fue el primero en postular un determinismo físico a partir de la idea de que si existiera una super inteligencia capaz de saber con exactitud todos los puntos y movimiento del cosmos, sería totalmente posible explicar el universo mediante las leyes de la física clásica. A esta hipótesis determinista se la conoce también como el «demonio de Laplace», aunque su autor no usó la expresión y se refirió a un ente super inteligente capaz de saber el pasado, el presente y el futuro del universo.

Actualmente, en el marco de la discusión entre determinismo o indeterminismo físico existe un amplio debate entre una posición determinista basada en la teoría de la relatividad de Albert Einstein, y la posición indeterminista de la teoría de la mecánica cuántica de Max Planck y Niels Bohr. A partir de estas dos grandes posturas, se desprenden la mayoría de los debates y posiciones referentes al problema del azar o la indeterminación del movimiento de las partículas. Según la física cuántica, las leyes de la física clásica no sirven para explicar el «comportamiento indeterminado» que presentan las partículas subatómicas. A partir del principio de incertidumbre de Werner Heisenberg, la física cuántica advierte que no es posible determinar ni predecir con total arbitrariedad y exactitud el movimiento y la masa de las partículas. El experimento del gato de Erwin Schrödinger, representa con claridad la paradoja de la indeterminación cuántica.

Por otra parte, la perspectiva de la física clásica, desde Isaac Newton hasta la física relativista de Einstein, se basa en el principio de causalidad para explicar todos los fenómenos del universo, según el cual el orden causal de los fenómenos se sigue necesariamente según un determinismo o ley, la cual nos permite comprender y predecir la naturaleza del movimiento y los fenómenos. Sin embargo, el movimiento cuántico es impredecible y por ende, rompe con el principio de causalidad.

Einstein-Bohr
Foto de Niels Bohr (izquierda) y Albert Einstein (derecha)

Determinismo biológico.

Es el determinismo aplicado al ámbito de la biología, la anatomía y el estudio de las especies. Según el determinismo biológico, los procesos vitales de los seres vivos, tanto de los individuos como de las especies, están determinados por un orden causal que es posible explicar y predecir. En el campo de la biología evolutiva, el lamarckismo y la Teoría de la evolución de Charles Darwin, postulan que el origen de las especies está determinado por el ambiente y el proceso de selección natural. El determinismo biológico postula que la evolución de las especies se da por las condiciones naturales y ambientales, las cuales determinan las respuestas de los seres vivos y la evolución mediante el proceso de adaptación.

En el ámbito de la genética, Gregor Mendel, elaboró un determinismo genético según el cual los rasgos físicos y biológicos de las generaciones pueden explicarse mediante la herencia. Las características genéticas son transmitidas de generación en generación y determinan gran parte de la biología el comportamiento de las nuevas generaciones. La epigenética, estudia los cambios y alteraciones del ADN e investiga cómo se determinan estas mutaciones, cuáles son los factores determinantes de tales cambios y alteraciones genéticas.

determinismo biológico
El determinismo biológico establece que la evolución de las especies está determinada por el ambiente

Determinismo en las ciencias sociales.

  • Determinismo histórico: Es el determinismo aplicado a los hechos y acontecimientos históricos, según el cual los sucesos están condicionados por el contexto social, económico y político de la época. Cada momento de la historia está determinado por sus condiciones contextuales, y los hechos históricos deben estudiarse a partir de estas determinaciones, contextos y condiciones que marcan el devenir de la historia.
  • Determinismo social: Es el determinismo que postula que la sociedad determina a los individuos. Las condiciones sociales son el contexto determinante de los valores, creencias y conductas de las personas. El determinismo social entiende a la sociedad como un todo que condiciona y determina los aspectos particulares del comportamiento individual. En el ámbito de la sociología, el determinismo social influyó profundamente en las bases del surgimiento mismo de esta disciplina. Autores como Montesquieu, Émile Durkheim y Max Weber, fundadores de la sociología, partieron de la idea de que lo social es un factor determinante en la formación de lo individual y las interacciones económicas, políticas y culturales en general.
  • Determinismo cultural: Es el determinismo que explica que las características de una cultura están determinadas por diversos contextos como el ambiental, el histórico y social, el económico y político. La cultura de los pueblos, sus creencias y valores está determinada por su historia y contextos particulares.
  • Determinismo económico: Es el determinismo que postula que las condiciones económicas y materiales determinan la vida individual, social y cultural. La economía y la distribución de los procesos de producción son el factor determinante de las interacciones sociales. Así, el determinismo económico o material explica que la estructura de la sociedad está formada a partir de las diferencias económicas, las cuales devienen en diferencias sociales. En este marco, el filósofo alemán Karl Marx elaboró una teoría socio-económica que explica el origen de la lucha de las clases sociales, a partir de las diferencias económicas y la distribución de las riquezas, las cuales determinan directamente la desigualdad social.
  • Determinismo geográfico: Es una corriente determinista de las ciencias sociales surgida en el siglo XIX, en un contexto de darwinismo social, positivismo y cientificismo. Según su fundador Friedrich Ratzel, el determinismo geográfico postula que las condiciones geográficas determinan el carácter y comportamiento de los individuos y las comunidades que habitan en determinado espacio geográfico. Ratzel afirma que la tarea de la geografía consiste en estudiar cómo el ambiente geográfico impacta y determina el comportamiento de los grupos humanos. En contraposición, el posibilismo geográfico invierte la idea y postula que los grupos humanos son los que modifican el entorno y determinan las condiciones geográficas según sus necesidades de subsistencia. Jared Diamond postuló la idea de una geografía humana, distinta de la geografía física y la climatología. La geografía humana estudia el desarrollo de la influencia humana en el ambiente y cómo las distintas civilizaciones respondieron a las condiciones geográficas a lo largo de la historia.
determinismo histórico
El determinismo histórico establece que las características de una sociedad están determinadas por sus acontecimientos históricos

Determinismo en la psicología y la lingüística.

Determinismo psicológico.

En el ámbito de la psicología existen múltiples abordajes e interpretaciones del concepto de determinismo:

En la psicología evolutiva, Jean Piaget y Lev Vygotsky destacaron la importancia del determinismo de factores como el lenguaje, lo biológico y lo social en el desarrollo y surgimiento de la inteligencia y la génesis del conocimiento. En el conductismo de B.F. Skinner, la conducta es el factor determinante de la psicología humana. Según el determinismo conductista, el comportamiento es determinado por los factores y estímulos ambientales.

En el psicoanálisis de Sigmund Freud se llama determinismo psíquico a la idea de que para todo fenómeno psíquico existe una causa que lo genera y que podemos explicar. Según Freud, ningún acto humano está librado al azar sino que todos los fenómenos de la consciencia están determinados y condicionados por el inconsciente. De manera que, no existe azar o libertad en las acciones humanas, sino que estas están determinadas por una «fuerza inconsciente» que va más allá del sujeto y su voluntad.

En el marco de los debates entre reduccionismo y emergentismo, el primero sostiene que la mente o consciencia está determinada por el cerebro y niega la posibilidad de una mente «libre» de lo físico; por otra parte, el emergentismo afirma que la mente emerge de las acciones físicas del cerebro, pero no está totalmente determinada por él.

Holismo
El holismo psicológico afirma que la consciencia humana debe ser entendida como un todo más allá de las partes, es la totalidad lo que determina la naturaleza completa de la psicología

Determinismo lingüístico.

Se llama determinismo lingüístico a la corriente de pensamiento que postula que el lenguaje es el factor determinante del pensamiento y el conocimiento humano. Según el determinismo lingüístico, los procesos de pensamiento, la formación de la subjetividad, incluso la percepción y la memoria están determinados por la estructura del lenguaje. Así, se afirma que los distintos lenguajes del mundo desarrollan distintos procesos de pensamiento en el cerebro, por lo que una persona que domine más lenguas tendrá distintos procesos de pensamiento según el lenguaje que utilice.

Benjamin Lee Whorf y Edward Sapir acuñaron el llamado «principio de la relatividad lingüística», según el cual el lenguaje resulta determinante en la formación del pensamiento, las ideas y la cultura de los individuos, y explica que existen diversas visiones del mundo según cuántas lenguas existan. Lee Whorf, planteó un concepto más determinista del relativismo lingüístico, en el cual la estructura del lenguaje: la gramática, condiciona la formación de ideas y la visión del mundo y la realidad de los individuos. Por lo que, según el principio de relatividad lingüística, no es posible tener una visión completamente objetiva del mundo, ya que esta visión esta condicionada por el lenguaje con el cual se la nombra.

Determinismo lingüístico
El determinismo lingüístico postula que el lenguaje determina la forma de pensar y ver el mundo

Críticas al determinismo.

Las críticas contemporáneas al determinismo se centran alrededor de su aplicación en el ámbito ético y la cuestión del libre albedrío. Algunos argumentan que el determinismo, llevado a su extremo, socava la responsabilidad moral, ya que si nuestras acciones están predefinidas, la noción de culpa o mérito pierde su fundamento. Además, las teorías de complejidad y caos, como la teoría del caos y el efecto mariposa, ofrecen una visión donde pequeños eventos aleatorios pueden desencadenar resultados impredecibles, sugiriendo que el mundo no es perfectamente predecible ni determinista. Las interpretaciones modernas de teorías cuánticas refuerzan este enfoque, proponiendo que el indeterminismo es una característica inherente del universo.

Teorías relacionadas al determinismo.

Teoría del caos y efecto mariposa.

La teoría del caos corresponde a una rama de la ciencia que estudia los sistemas dinámicos y la complejidad que presentan ciertos sistemas físicos y matemáticos a la hora de estudiar su patrón de movimiento. La teoría del caos, parte de sistemas deterministas y busca explicar porqué existen sistemas cuya dinámica es tan compleja que resulta difícil o casi imposible de explicar y predecir. Se llaman sistemas caóticos a aquellos sistemas que presentan una predictibilidad muy variable, por momentos y luego vuelven a convertirse en caóticos e impredecibles.

Se conoce como efecto mariposa a la idea determinista de que un ligero cambio en la realidad, por más ínfimo que sea, puede desatar un conjunto de cambios monumentales a largo plazo. Así, el aleteo de una mariposa puede desencadenar una serie de eventos aparentemente aleatorios que pueden causar un desastre en cualquier otra parte del mundo.

Efecto mariposa
Según la metáfora del efecto mariposa, el simple aleteo de una mariposa en un lugar (X), como Buenos Aires, podría generar una catástrofe en cualquier otro lugar (Y), como Tokio

Implicaciones culturales y sociales.

La influencia del determinismo en la cultura y la sociedad se manifiesta en cómo estructuramos nuestros sistemas legales y normativos. En algunos contextos culturales, la creencia en un orden predestinado puede influenciar la educación y las expectativas de comportamiento, reforzando normas estrictas de conformidad. En contraste, sociedades que valoran el libre albedrío tienden a promover sistemas educativos que subrayan la creatividad y la autonomía personal, argumentando que los individuos poseen el poder para influir en su destino. Ejemplos notables incluyen sistemas jurídicos que abogan por la rehabilitación en lugar de un castigo retributivo, basados en la creencia de que los individuos pueden cambiar su curso de acción. Esta dicotomía refleja la lucha continua entre determinismo e indeterminación en nuestras instituciones y prácticas culturales.

Teoría del todo.

Se conoce como teoría del todo al amplio conjunto de teorías de la física teórica que intenta resumir los postulados más importantes de la física en una sola gran teoría unificada, que integra tanto planteamientos de la física clásica relativista como de la física cuántica y la física estadística. La idea de una «teoría del todo» se basa en un principio determinista y su primera expresión surge originariamente del «demonio de Laplace», es decir, a partir de la suposición de que si existiera una super inteligencia capaz de estudiar y analizar todos los fenómenos del universo, podría resumirse su explicación a una «única fórmula» total y unificada. Actualmente, la teoría del todo se enfrenta a la dificultad de unificar la física clásica con la física cuántica, debido a sus diferencias teóricas y conceptuales, donde uno de los principales problemas y desafíos radica en la dicotomía determinismo/indeterminismo. Además de la teoría cuántica y relativista, los principales conceptos que integra la teoría del todo son: La teoría de cuerdas, la teoría M, el Multiverso, el campo unificado espaciotiempo, la sincronicidad, entre otras.

Teoría del todo
La teoría del todo es una empresa monumental que busca unificar e interrelacionar las teorías más importantes de la física teórica

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Aci, E. M. (3 de julio de 2023). Definición de determinismo. Características, origen, historia y tipos. Definicion.com. https://definicion.com/determinismo/