Definición de lenguaje

El término lenguaje tiene muchos orígenes, es decir, puede ser analizado desde varias ópticas. Describiremos tres de ellas.

• Origen francés, ya sea en Occitania o Provenza, la palabra lenguaje es entendida como lenguatge, “conjunto de lenguas”. En este caso, hace referencia a los idiomas.
• Origen latino, lenguaje proviene de lingua, expresión vinculada con el órgano empleado en el habla: la lengua.
• Origen romano, del verbo lingere, cuyo significado es lamer.

Básicamente, alude a un conjunto de sonidos con los cuales el humano transmite sus pensamientos o sentimientos. También identifica al grupo de signos que los seres humanos empleamos para comunicarnos con integrantes de nuestra misma especie. Estos sistemas pueden ser sonoros, como el habla; gráficos, como la escritura; o, corporales, como los gestos.

Lo cierto es que nos referimos a una capacidad humana. Dicha capacidad permite al hombre desarrollar la facultad de relacionarse con los demás.

Es importante destacar que el sistema de señales o signos al cual hacemos mención puede ser de lo más diverso. Aquí el valor está puesto en la habilidad innata de comprender un determinado mensaje y, también, de transmitirlo.

Curiosamente, investigadores descubrieron que el lenguaje no es solo una capacidad comunicativa de los humanos. Existen otras especies que también emplean signos sonoros y corporales para relacionarse entre sí.

Características del lenguaje.

Si bien el lenguaje es una facultad universal, no cabe duda de que es la educación la que permite amoldarlo y, sobre todo, desarrollarlo con total pulcritud. Veremos a continuación las principales características de esta capacidad humana.

• Se presenta como una capacidad innata de todo ser humano. Es universal.
• Permite la comunicación entre la gente.
• Es racional.
• Se aprende en el seno de una cultura.
• Se vale de la experiencia.
• Posibilita el intercambio de información.
• Utiliza símbolos, señas o sonidos.
• Se expresa a través de signos gráficos, sonidos o gestos.
• Su origen está en una convención social.
• Se modifica según lo requiere el entorno sociocultural.
• Puede ser verbal o no verbal.
• Resulta de diferentes lenguas y de un proceso de codificación.

Funciones del lenguaje.

El lenguaje tiene funciones obvias como, por ejemplo, permitir que las personas se comuniquen entre sí y transmitan mensajes diferentes como sentimientos, ideas, sensaciones, etc. Sin embargo, el lenguaje es una facultad que ha posibilitado al hombre crecer en sociedad, desarrollar lazos y, sobre todo, construir una cultura.

Asimismo, el lenguaje presenta una serie de funciones que estudiaremos a continuación.

• Función apelativa: también conocida como conativa. Este tipo de función pone su foco en el receptor. Es decir, se presenta cuando el emisor persigue el objetivo de modificar la conducta del destinatario de su mensaje. Espera una respuesta de este, ya sea condicionando o alterando su comportamiento. Suele utilizarse en oraciones imperativas, así como también en expresiones interrogativas o exhortativas.
• Función fática o de contacto: denominada igualmente como función relacional, se orienta al canal de comunicación entre los participantes de un proceso comunicativo. Tiene como propósito comprobar el contacto entre las partes, es decir, valida la recepción y la comprensión de un mensaje. Además, inicia, interrumpe o finaliza la conversación. La intención de este tipo de función no es informar, sino permitir el contacto entre personas. Luego, esta comunicación podrá ser más profunda. Es decir, solo intenta comenzar el canal de comunicación y dejarlo abierto.
• Función referencial: esta función, a veces nombrada como representativa o informativa, tiene que ver con el contenido del mensaje que se transmite y, además, con la situación en la que se desarrolla el proceso comunicativo. Brinda información sobre algo concreto y lo hace objetivamente, como ocurre, por ejemplo, al dar la hora. O sea, alguien emplea el lenguaje para informar algo. Evita emitir juicio de valor y no está en su intención provocar un efecto.
• Función emotiva: conocida asimismo como expresiva o sintomática, está centrada en el emisor del proceso. Es decir, en aquel que comienza con una conversación; analiza la intención subjetiva del mismo. Expresa deseos, estados de ánimo, emociones, etc.
• Función poética o estética: esta clase de función se vincula con el mensaje, sobre todo, con la forma del mismo. Aquí prevalece un discurso bien logrado, que llama la atención y embellece el proceso. Esto se alcanza gracias a un uso correcto del código y de la expresión. Lo relevante no es el contenido, sino su forma.
• Función metalingüística: la última de las funciones que estudiaremos se centra en el código de la lengua. Es decir, aclara el mensaje al explicarse a sí mismo. Esto lo vemos, por ejemplo, en la gramática.

Tipos de lenguaje.

El lenguaje se puede clasificar de numerosas maneras. Esto dependerá de muchos condicionantes, uno de ellos es el ámbito en el cual se desarrolle. Sin embargo, detallaremos a continuación los más importantes.

A partir del modo de comunicación, el lenguaje puede ser verbal o no verbal. Este último, a su vez, se desglosa en facial, corporal y proxémico. Los analizaremos un poco más de cerca.

1. Lenguaje verbal: es aquel cuyo recurso principal es el uso concreto de la palabra. Comprende el lenguaje oral y el escrito, es decir, los signos gráficos.
2. Lenguaje no verbal: en él no se utilizan las palabras, sino que se lleva a cabo a través de otra clase de recursos. Aquí encontramos tres tipos:

• Lenguaje no verbal facial: como bien lo dice la expresión, se vale de los gestos faciales para comunicar o transmitir un estado de ánimo, impresión o sentimiento. Por citar algunos ejemplos: cuando una persona sonríe es un indicador de alegría, simpatía. Mientras que, cuando frunce el ceño, es señal de enojo o recelo.
• Lenguaje no verbal corporal: también conocido como kinésico. Se trata de todo aquello que el cuerpo comunica, ya que sus acciones también transmiten información. Una muestra clara surge cuando alguien se cruza de brazos durante una conversación, está expresando que se cierra las ideas nuevas y que no desea continuar con la charla. Asimismo, el movimiento constante puede significar desinterés o aburrimiento.
• Lenguaje no verbal proxémico: se refiere al tipo de lenguaje que otorga valor al espacio en el que se desarrolla la comunicación y a la distancia entre los individuos. Podemos mencionar como ejemplo cuando dos sujetos están en discusión y sus cuerpos se mantienen relativamente cerca, pero lo mismo ocurre cuando están unidos por lazos afectivos. La diferencia será la situación en la que se produzca el encuentro.

Según el contexto social, el hablante puede hacer un uso formal, informal o técnico del lenguaje. Es decir, la manera de expresarse que tiene el sujeto da cuenta de distintos estilos.

• Lenguaje cotidiano: se refiere al empleo informal, aquel que se aplica en contextos distendidos, más de confianza y en los que se desarrolla una relación de horizontalidad entre las personas que participan del proceso. Ejemplo de ello son las charlas entre amigos o familiares.
• Lenguaje formal: este lenguaje se emplea en situaciones en los que los hablantes deben comportarse de manera correcta y cortés, ya sea para generar una buena impresión o, simplemente, porque la circunstancia así lo amerita. Puede aplicarse en casos de relaciones jerárquicas o cuando se desarrolla una conversación por primera vez.
• Lenguaje técnico: aquí nos referimos a un tipo de lenguaje aplicado a un ámbito concreto, muchas veces vinculado a lo académico o a un campo o área específica. Este tipo de lenguaje es compartido por aquellos que forman parte del mismo ámbito de aplicación.

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Navicelli, V. (31 de marzo de 2022). Definición de lenguaje. Características, funciones y tipos de lenguaje. Definicion.com. https://definicion.com/lenguaje/