Manipulación es una palabra que refiere al acto de manipular. En su origen etimológico encontramos que deriva del latín manipulus, cuya raíz es manus que es igual que decir “mano”. Asimismo, se forma con el verbo latino plere, que refiere a “llenar”. Por lo tanto, manipulación es una acción que consiste en trabajar manualmente algo. O, con más precisión, lo que se opera con las manos, se abarca, toma y moldea con ellas.
A partir de esto se han desarrollado varias interpretaciones de la noción que aquí estamos estudiando. Sin embargo, la principal es la que alude al manejo que se hace de algo a través de las manos. Manipulación es un vocablo que se aprovecha en muchos campos en los que no se utilizan partes del cuerpo a la hora de manipular. La idea central es que las manos guían y muestran un camino a seguir. Por lo cual, estén o no presentes en el acto de manipular, aplica a la acción de cambiar o modificar algo.
De acuerdo a lo dicho, manipulación es un término con una connotación un tanto negativa, ya que alude a un abuso discursivo de una persona sobre otra. Sin embargo, existen múltiples circunstancias en las cuales se manipula algo con un propósito claro y no siempre es negativo. Pensemos, por ejemplo, en los alimentos.
Entonces, podemos afirmar que manipulación tiene dos interpretaciones:
- Una positiva: a partir de la cual se establece que el acto de hacer con las manos modifica o transforma algo en beneficio de la gente. Para lograrlo es importante hacerlo con responsabilidad y conocimiento de causa.
- Una negativa: considerada como un abuso de poder tras utilizar mecanismos discursivos para controlar el comportamiento y sentimiento de una persona o de un grupo.
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Tipos de manipulación.
Si bien existen muchos tipos de manipulación, aquí vamos a detallar cuatro de los más relevantes o, mejor dicho, principales. De los mismos se desprenden las demás variedades.
Manipulación psicológica.
La manipulación psicológica es, quizás, una de las más conocidas a la hora de mencionar este concepto. Es considerada como una acción violenta que afecta la autoestima de una persona. La misma pierde todo valor y conciencia de sí a partir del accionar de otra mucho más fuerte que absorbe su capacidad de salir adelante.
La herramienta con la cual se opera en este tipo de manipulación es la palabra. Con ella, un sujeto es capaz de dominar a otro y de controlar su cognición, sus afectos y hasta su comportamiento. Cabe destacar que esto puede ocurrir hacia una persona o varias, es decir, dominar y manipular a un colectivo social.
Esta clase de control puede darse en diferentes ámbitos, ya sea familiar, institucional, amoroso, político o social.
En la Roma antigua, las autoridades militares utilizaron este vocablo para referir al control o manejo que se tenía sobre los hombres que iban a la guerra.
Básicamente, es un mecanismo a partir del cual se domina la conducta de alguien que pierde total autonomía. Esto ocurre de manera intencional, puesto que todo acto de manipulación persigue un objetivo concreto.
Manipulación genética.
La manipulación genética refiere a un tipo de técnica de índole científico-tecnológico cuyo propósito es cambiar, modificar o combinar la estructura del ADN y otros ácidos nucleicos para obtener nuevas formas de vida. Esto, obviamente, ocurre solo entre seres vivos.
Es muy común la combinación genética, por ejemplo, en perros o caballos, entre otras especies. La razón de este procedimiento es lograr una raza mucho más sofisticada y excéntrica. En innumerables ocasiones, esta recombinación ha generado problemas de salud en el árbol genealógico del animal.
A este tipo de manipulación también se la denomina ingeniería genética, porque se trata de añadir, alterar o eliminar genes del propio código genético de un ser vivo.
Manipulación de alimentos.
La manipulación de alimentos refiere a toda actividad laboral en la cual se opera con comida. Es decir, se está en contacto directo con diferentes productos comestibles, ya sea en su proceso de fabricación, transformación, elaboración, envasado o almacenamiento. Asimismo, no se descarta la etapa de transporte y distribución del alimento y, sobre todo, su venta y servicio.
En este sentido, manipular alimentos es una tarea de gran responsabilidad. Lo que supone que quien la desarrolle debe contar con una formación en higiene y seguridad alimentaria que brinde calidad y garantía de cuidado al consumidor final.
Un trabajador que manipula alimentos debe gestionar:
- Una certificación de trabajo
- Un carné de manipulador de alimentos
- Una formación o capacitación en manipulación de alimentos
Manipulación masiva.
La manipulación masiva se refiere a la que realizan los medios de comunicación de masas cuando responden a ciertos intereses económicos y políticos. En este accionar, periodistas y editores manipulan la información para lograr objetivos previamente establecidos.
Bajo esta óptica, las noticias o los hechos que se comparten tienen una mirada sesgada de la realidad. El enfoque a partir del cual se distribuye la información es acotado y completamente intencionado. Además, este mecanismo es utilizado por diversos medios de comunicación para favorecer a empresarios o personas con imagen pública.
La manipulación masiva sienta sus bases en:
- Tergiversación de los hechos.
- Selección de lo que se transmitirá como suceso informativo.
- Distorsión de piezas comunicacionales como, por ejemplo, fotografías.
- Fuentes de información caducas o falsas.
- Intencionalidad en la tipografía, la semántica y la maquetación.
Manipulación para el derecho.
En el ámbito del derecho, la palabra manipulación es propia del derecho penal y consiste en un tipo de delito en el cual una persona instiga a otra a cometer la violación a una ley establecida.
Es decir, la figura del manipulador, en este campo, es vista como un inductor o, más conocido, como instigador. Éste tiene la misma carga penal que cae sobre el autor material del delito. Sin embargo, lo que varía es la pena, según lo establezca el código penal de cada país. Esto se debe a que el sujeto que manipula a otro para cometer un delito no es precisamente el autor material del mismo, pese a haber sido él quien ha propuesto llevar a cabo el acto delictivo.
Cabe destacar que esta manipulación puede ser de carácter psicológico o coactivo y, para el derecho penal, es un modo concreto de participación en el delito.
Para que sea penado por la ley, este tipo de inducción debe reunir una serie de requisitos:
- Inducción directa.
- Instigación a cometer un delito específico.
- Acción determinante.
- Provocación dolosa.
- Relación causal en la comisión del delito.
- Consumación del delito.
Diferencia entre manipulación, persuasión, argumentación.
Es fundamental diferenciar estos tres términos, ya que se los suele tomar como sinónimos y no lo son.
Argumentación.
La argumentación es una acción lógica y coherente que responde a una idea que se defiende con determinación. Se establece un razonamiento para justificar o refutar un tema concreto y particular. Se realiza con conocimiento y pruebas que sostengan lo que se argumenta.
Persuasión.
Se conoce como persuasión al acto de tomar un argumento para aprovecharlo con una finalidad concreta. Es decir, no solo se emplea para defender o refutar una idea, sino que, además, se usa para cambiar la conducta de una persona.
Manipulación.
Como bien mencionamos al principio, la manipulación pretende dirigir o modificar el comportamiento de alguien aplicando como herramienta diferencial el poder. Es decir, se pone en juego la dominación que un sujeto tiene por sobre otro u otros.
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Navicelli, V. (29 de junio de 2022). Definición de manipulación. Tipos, para el derecho, diferencia entre argumentación, persuasión y manipulación. Definicion.com. https://definicion.com/manipulacion/