Inducción es el nombre con el que se conoce, coloquialmente, a la acción de hacer que alguien haga algo o a la acción de provocar algo.

Es, además, el término empleado en filosofía para indicar cómo, a partir de un conjunto de hechos u observaciones particulares e individuales, puede inferirse un principio general, una ley, de ese conjunto.

Se emplea también en física para hacer referencia a la generación de fenómenos eléctricos, a distancia y sin contacto, entre un cuerpo y otro.

El término proviene del latín inducĕre y significaba mover o trasladar energía a otro elemento.

En medicina.

En el ámbito médico, el uso de la palabra inducción puede hacer referencia a diferentes fenómenos. Veamos dos de ellos.

En tratamientos oncológicos.

En primer lugar, el concepto también se utiliza con el nombre de tratamiento de inducción. Es la forma de tratamiento inicial que se lleva a cabo para poder comenzar a atacar una enfermedad.

Tiene un gran uso en el área de oncología, es decir, para el tratamiento del cáncer en pacientes. Por este motivo, suele formar parte de un conjunto de tratamientos que, realizados a tiempo (en función de lo avanzado de la enfermedad), puede resultar muy útil para el paso a los siguientes tratamientos.

Tratamientos inductivos
En medicina, la inducción alude al conjunto de tratamientos para ralentizar el avance de una enfermedad, como el cáncer.

Un ejemplo de esto es cuando a un paciente con cáncer se le realizan tratamientos como quimioterapias o radiación. Estos tienen como fin ayudar a reducir el tamaño del tumor para que, al pasar a la siguiente etapa (una cirugía que extirpe el tumor, por ejemplo), los médicos tengan más probabilidades de éxito.

En el parto.

El uso más conocido del término inducción en medicina, sin embargo, es cuando está relacionado con el parto, y hace referencia a los mecanismos que los médicos utilizan para iniciar al trabajo de parto o para acelerarlo.

Algunas de las causas por las cuales la inducción es la alternativa óptima son las siguientes:

  • Quien está por parir ha roto bolsa (es decir, la bolsa de agua que envuelve al bebé) pero aún no ha comenzado el trabajo de parto.
  • Quien va a parir tiene presión alta o alguna otra condición que pueda haberse desarrollado sobre el parto y que pueda ser leve o altamente peligrosa para ella y/o el bebé.
  • Ha experimentado, anteriormente, un aborto después de las 20 semanas: esto se conoce como muerte fetal o mortinato. En estos casos, la inducción protege tanto a la madre como a su bebé.
  • Se ha pasado de la fecha de parto: cuando durante la semana 39 o, incluso, la 40, la madre aún no experimenta el inicio de su parto, los médicos pueden tomar la decisión de inducirlo de forma artificial.

Las formas en las que la inducción del parto se provoca son diferentes; una de ellas, por ejemplo, es mediante la administración de oxitocina. Este medicamento, que se administra vía intravenosa, es el encargado de forzar al útero a contraerse: dicho de otro modo, con oxitocina se inician las contracciones.

Estas pueden ir paulatinamente volviéndose más fuertes , más intensas y más frecuentes, por lo que ayudan a que el parto se ponga en marcha. De este modo, al acelerarse este proceso, la madre puede llegar con más energías al momento de pujar para que el bebé nazca.

Inducción del parto
La inducción del parto es una alternativa para acelerar el nacimiento del bebé de forma artificial.

Inducción electromagnética.

Con el nombre de inducción electromagnética se conoce al proceso mediante el que campos magnéticos diferentes generan campos eléctricos. Dicho de otro modo, alude al fenómeno mediante el cual se produce corriente eléctrica (inducida, de ahí el nombre) a través de campos magnéticos.

Este fenómeno recibe también el nombre de Ley de Faraday por un químico y científico inglés, Michael Faraday (1791-1867). Hacia 1831, el científico tomó una batería que le brindaba corriente a una pequeña bobina.

Este experimento contaba con un antecedente algunos años antes: Hans Christian Ørsted, un físico danés, fue el primero en experimentar con (y descubrir) el electromagnetismo. En la década del 20, logró observar cómo, si movía un imán en un circuito cerrado con alambres conductores, se podía producir corriente inducida.

Faraday intentó replicar este experimento pero de la manera inversa: utilizó un imán para intentar generar corriente eléctrica. Colocó el imán dentro de un espiral de alambre de una sola vuelta (una espira), por donde fluiría la corriente eléctrica.

En la actualidad, ese descubrimiento se utiliza de modo frecuente; veamos algunos de sus usos a continuación:

  • Los motores eléctricos
  • Los alternadores que se emplean en las centrales eléctricas
  • Los transformadores que se usan para transmitir energía eléctrica
  • Las cocinas de fascinación

Este último artefacto, a diferencia de una cocina eléctrica, funciona a través de imanes que se estimulan eléctricamente. Al producirse un campo magnético, se genera calor para poder aumentar rápidamente la temperatura de los alimentos. Suele recomendarse, para este tipo de productos, elementos de cocina que tengan base de hierro o, incluso, de acero ferromagnético, es decir, acero inoxidable.

Cocinas de inducción
Las cocinas de inducción utilizan campos magnéticos para calentar los alimentos.

Como forma de razonamiento.

Finalmente, uno de los usos más extendidos del término inducción es el utilizado para identificar una forma de razonar.

El llamado razonamiento inductivo tiene algunas características básicas:

  • Se construye un principio general sobre la base de experiencias individuales;
  • Su estructura es, entonces, premisas (es decir, el argumento que se presenta como cierto) y una conclusión;
  • Sus conclusiones no son definitivas, ya que las premisas surgen de observar un aspecto de la realidad; existe la posibilidad de que con nuevas premisas y nuevos aportes esa conclusión cambie;
  • Las conclusiones pueden considerarse ciertas o verdaderas gracias a lo que las premisas aportan (de forma exhaustiva y crítica). Siempre, sin embargo, es importante que esa conclusión sea puesta a prueba;
  • Son un elemento muy útil en las investigaciones y trabajos científicos, ya que permiten la exploración de nuevas áreas de la realidad en función de esas premisas.

La inducción, como razonamiento, tiene un amplio uso en el universo de la ciencia ya que es el elemento gracias al cual es posible hacer predicciones, anticipar eventos y/o presentar relaciones de causa y consecuencia que tengan alta probabilidad de ocurrir.

Un aspecto para considerar, además, es su diferencia con la deducción y la abducción. El primer razonamiento parte de una premisa más amplia y general para, luego, unir las premisas con ella. Estas premisas generales son, en ocasiones, presentadas como leyes o principios tomadas como verdaderas, sin posibilidad de discutirlas.

Por otra parte, el razonamiento abductivo se vincula con optar por considerar como válido un argumento o una explicación que tiene más probabilidades de ocurrir que otras. Dicho de otro modo, se presenta como una hipótesis, o una conjetura, para explicar un fenómeno.

Otros usos.

Un último uso del término inducción es el que alude a que se insta a una persona a hacer o decir algo, muchas veces contra su voluntad.

Algunos de los ejemplos más frecuentes sobre ello tienen que ver con, por ejemplo, llevar a una persona a hacer una mala acción o a cometer un delito. Muchas veces, puede ser a fuerza de argumentos que no son ciertos, con engaños o con promesas de dinero que pueden ser reales o no.

Si bien desde la ley se considera como ejecutor de ese crimen a quien efectivamente tenía intenciones de realizarlo (no a quien es instado o instigado a cometerlo), la persona inducida puede quedar involucrada.

Manipulación
La inducción ejercida sobre una persona funciona como una manipulación para que haga algo.

Otro uso del término se vincula con la práctica sexual en los vínculos entre personas, fundamentalmente entre los más jóvenes. Cuando ellos comienzan a crecer, las experiencias amorosas que otros adolescentes tienen a su alrededor comienzan a ser una temática frecuente. Muchas veces, es el entorno, el deseo de no desconocer estas prácticas o incluso una pareja que presiona para hacerlo lo que lleva al adolescente a hacer lo mismo.

Es importante que, tanto en el entorno escolar como en el familiar, puedan encontrar la contención y el espacio seguro para plantear sus dudas al respecto y poder experimentar su vida amorosa de una forma saludable.

Esto incluye no solo no realizar prácticas que no desea solo para complacer a otros, sino considerar también con quién desea hacerlo y que es importante que esas experiencias puedan tener lugar con pares, de su edad, y no con adultos.

Citar este artículo

Fernández, A. M. (5 de abril de 2023). Definición de inducción. Perspectivas, características y ejemplos. Definicion.com. https://definicion.com/induccion/