Definición de motivación

La palabra motivación viene del latín motus, cuyo significado es movido, combinado con motio, que es movimiento.

Desde los ámbitos de estudio y acción psicológica y filosófica, la motivación está basada en los elementos que sirven de impulso para que una persona pueda llevar adelante determinados actos y mantenerse firme en los modos de conducirse, hasta llegar a los objetivos que se había planteado.

También se suele asociar a la motivación con la fuerza de voluntad para realizar un esfuerzo específico con la finalidad de llegar a una meta predefinida. Además, se asocia al concepto con el interés.

Motivación intrínseca y motivación extrínseca.

La motivación se puede dividir en dos tipos, que son la intrínseca y la extrínseca. La primera parte de la forma de entender personalmente el mundo, y no la mueven incentivos de carácter externo. No es necesario reforzarla, ya que se origina en la propia individualidad de los seres humanos.

La motivación extrínseca, en tanto, sí está sujeta a ciertos factores de afuera. Se suele enfocar en servir de ayuda para ejecutar algunas tareas, como un medio para llegar a cierto objetivo.

La motivación extrínseca puede surgir por varios factores:

• Dinero
• Tiempo laboral
• Beneficios de turismo
• Automóviles
• Comidas en restaurantes
• Opiniones externas
• Tiempo de vacaciones

En cambio, los factores intrínsecos tienen que ver mucho más con los significados que uno mismo deposita en las cosas que quiere hacer. En el caso que nos convoca, está mucho más arraigado a la individualidad. Por decirlo claramente, en lo que respecta a la motivación extrínseca es más factible que uno cambie de opinión o decida dar un giro.

De todas maneras, tampoco es que la motivación intrínseca no pueda sufrir modificaciones, pero lo cierto es que, generalmente, para eso debe modificarse primero algo en la persona, porque es un tipo de motivación que está estrechamente ligado al deseo.

La motivación intrínseca también tiene sus propios factores. Los principales son:

• Autonomía: Son las fuerzas impulsivas que rigen la vida de la gente y que nos hacen libres de controlar nuestras acciones.
• Maestría: Se trata de desear ser mejores en las cosas que son de importancia para nosotros.
• Propósito: Su importancia radica en tener intenciones de concretar aquello que anhelamos para servir a algo que nos excede o que es más grande que uno.

Motivación positiva y motivación negativa.

La motivación, además, puede ser de carácter positivo o negativo, en cuanto a las cargas emocionales que la mueven.

• Motivación positiva: Es lo que hace que alguien comience o se sostenga en conductas, gracias a obtener recompensas de carácter positivo, que pueden ser tanto intrínsecas como extrínsecas. Por ejemplo, el placer, los incentivos, el logro de objetivos o la mejora de la salud.
• Motivación negativa: Hace que un sujeto adopte o se mantenga en conductas para evitar consecuencias desagradables, que pueden ser también intrínsecas o extrínsecas. Por ejemplo, el castigo, la burla, los celos o la frustración.

Motivación laboral.

Las motivaciones laborales son aquellas relativas al mundo del empleo. Resultan ser determinantes al establecer las bases de los modos de trabajar, afectando los modos de dirigir, intensificar y rendir en cuanto a los esfuerzos que se llevan a cabo para perseguir objetivos.

Para lograr motivación en los empleados, las empresas y organizaciones se suelen valer de estructuras prefijadas, que sirven de aliento para individuos más productivos y, por el contrario, desalientan la improductividad.

En este sentido, la motivación laboral muchas veces se sostiene en sistemas de recompensas, o incluso contemplan, asimismo, castigos.

Las recompensas para motivar a los empleados suelen ser variadas. Por ejemplo, un sistema de incentivos que premie económicamente los objetivos acordados previamente, vouchers, tarjetas de regalos y una larga lista.

En estos términos, un modo de motivación laboral muy usual es la del cobro de comisiones por ventas en empleados de comercio. Así, el personal se esmera en llevar el rendimiento de una empresa al máximo, porque de ese esfuerzo depende el dinero que ingresará a sus cuentas a fin de mes.

Puede haber, incluso, un tipo de motivación que, de alguna manera, es un poco más implícita: el ascenso laboral.

En nombre de ese progreso, alguien quizás opte por aumentar considerablemente la intensidad y calidad de su trabajo. Además, es un estilo de motivación que admite tanto la versión intrínseca como la extrínseca porque, si bien depende de factores externos, también puede tener un arraigue muy fuerte con los anhelos de realización personal.

En el contexto laboral, igualmente, es posible detectar empleados con motivaciones intrínsecas relativas a su deseo de desarrollo personal, no solo en términos de buscar un ascenso o un aumento, sino partiendo del genuino interés de aprender nuevas tareas, conocer procesos y demás.

Estos empleados suelen ser los más productivos, y además es ameno desarrollar tareas con ellos, ya que no están compitiendo con otros sino pensando en su propio crecimiento.

Ámbitos de la motivación.

Así como en el trabajo, la motivación es necesaria en muchos otros entornos o campos de estudio. Enumeramos algunos, aunque es importante decir que la motivación es fundamental para la vida misma, puesto que sirve de motor para seguir en movimiento y no estancarse en un estado de conformidad.

Algunos ejemplos de ámbitos en los que se necesita motivación:

• El deporte.
• La escuela / universidad.
• Una carrera política.
• La mejora de una relación romántica, de amistad, familia, etc.
• El cuidado de la salud.
• El cuidado estético del cuerpo.
• El posicionamiento en un ámbito de especialización.
• Las actividades deportivas de aire libre, como escalar una montaña.
• La adaptación a nuevas rutinas.
• La hora de despertarse.
• La limpieza del hogar.
• La alimentación.

Desmotivación.

La desmotivación es lo contrario a la motivación. Se trata de sentirse desesperanzado frente a los problemas u obstáculos que se presentan en la vida, o de estar angustiado, sin entusiasmo, con pocas ganas y pocas energías para depositar en diversas actividades.

La desmotivación puede ser un elemento común en los individuos, y suele aparecer cuando hay un límite o bloqueo frente a los anhelos.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que sus consecuencias pueden ser de gravedad, y por esto se debe prestar atención y prevenirlas.

Si es un elemento que se presenta en un período muy largo de tiempo, o que se reitera una y otra vez, tal vez genere un problema de salud.

Esto afecta además la capacidad de decidir, de arriesgarse o pone un límite en las capacidades vinculares o en la productividad.

Además, las personas desmotivadas suelen ser pesimistas y abandonan proyectos (o ni siquiera los inician), por la simple creencia de que no podrán. Esto está estrechamente asociado al autoboicot, que es una conducta nociva que lleva a estancarse y dedicarse a simplemente vivir, sin nunca encontrar algo que «mueva» a uno.

Citar este artículo

Krause, G. (28 de febrero de 2022). Definición de motivación. Intrínseca, extrínseca, positiva, negativa y otros tipos. Definicion.com. https://definicion.com/motivacion/