Previsión es el nombre con el que se conoce a la acción o el efecto de prever, es decir, de poder anticipar eventos, situaciones y contingencias.

El término proviene del latín praevisio y, a su vez, del término praevidēre. En español, estos términos se pueden traducir como ver con anticipación.

En español, el término del que procede (prever) suele verse también escrito de la siguiente manera: preveer. De acuerdo con los manuales de ortografía de nuestra lengua, este término es incorrecto, y surge del cruce entre dos verbos:

  • Prever
  • Proveer

El verbo prever, entonces, debe conjugarse como conjugamos el verbo ver (vio, previo; viendo, previendo, entre otras).

Características.

La previsión es, entonces, la capacidad de poder anticiparnos a eventos o situaciones que pueden tener lugar a futuro. Esto, en términos generales, puede aplicarse a múltiples áreas y disciplinas:

  • Podemos prever la aparición de lesiones, al hacer actividad física, tratando de corregir nuestra técnica al correr, levantar pesas o hacer ejercicios en general;
  • Podemos prever problemas de salud a través de hábitos saludables de alimentación, ejercicio y descanso.
  • Podemos prever un mes laboral complejo, cargado de actividades y entregas organizándonos en las actividades semanales y diarias.
  • Es posible prever si el panorama económico a futuro no parece positivo y poner manos a la obra en ello a través de cambios en nuestra conducta económica (gastos excesivos, ahorros).
La previsión está en estrecho vínculo con organizarnos, anticipar contratiempos y prestar atención a posibles eventos negativos.

La previsión, de este modo, implica algunos elementos fundamentales para poder tener lugar. En primera instancia, la prevención: esto alude a la preparación, a la toma de conciencia de que algo (a veces negativo, a veces positivo) puede ocurrir a futuro y examinar si es posible tomar alguna medida.

Esto nos permite darle paso al segundo punto, la organización: al reconocer los posibles escenarios de algo que puede ocurrir, podemos analizarlos. Con esto, es posible determinar qué escenario tiene mayores probabilidades de ocurrir, qué efectos puede tener y qué tan favorable puede resultar.

Al reconocer las mejores alternativas (dentro de lo posible), es probable que podamos dejar de lado aquellas que no nos resulten positivas o, en el peor de los casos, tener un plan de acción en caso de que efectivamente ocurra.

Cabe destacar que, si bien es posible que contemplemos todos los escenarios posibles para un evento, puede que no logremos en todos los casos prevenirlo. Esto se debe a que es imposible saber qué va a ocurrir a futuro, tanto con nosotros como con quienes nos rodean, y algunos eventos pueden golpearnos sin que tengamos posibilidad de haberlo previsto.

La capacidad de poder analizar alternativas nos ayuda a aprender a valernos por nosotros mismos y a prepararnos para eventos futuros; sin embargo, no impide que suceda aquello que no queríamos que ocurriera. Los errores o eventos negativos también pueden ser una instancia de la cual aprendemos.

Como conjetura o hipótesis.

Hipótesis
Las hipótesis implican prever hechos o situaciones a futuro en función de elementos reales con los que se cuenta aquí y ahora.

Uno de los usos que el término previsión tiene es, además de prevención, el de conjetura. Esto se construye a partir de la propia intuición vinculada con dos elementos:

  • Indicios o signos de que algo va a ocurrir
  • Nuestra atención y observación a esos eventos

Ciertas situaciones específicas nos permiten conjeturar y prever que algo puede ocurrir e, incluso, que efectivamente van a suceder. Esto también está vinculado con la idea de hipótesis, es decir, la posibilidad de que algo suceda, cuya base es la realidad observable.

La capacidad de previsión, como aquello que puede anticipar eventos a futuro, es un concepto muy recurrente en la mitología y en la cultura; a menudo, se manifiesta en forma de videncia o adivinación. Veamos, a continuación, algunas figuras de la sociedad occidental que tenían estas características.

En la mitología.

Existen algunos personajes de la cultura cuyas habilidades eran prever lo que ocurriría. Sin embargo, la clarividencia no era en ningún caso un don positivo, sino una maldición.

Uno de ellos es Tiresias (Τειρεσίας), el adivino más poderoso de la Antigua Grecia. Hijo de una ninfa y un pastor, se afirma que quedó ciego durante su juventud tras observar a la diosa Atenea bañándose. Lo maldijo quitándole la vista y, a la vez, brindándole la capacidad de ver el futuro.

Tiresias forma parte de algunas de las profecías más importantes de la antigüedad. Por ejemplo, previó las hazañas de Hércules en su adultez, y narra a los padres de Narciso que tendría una vida feliz siempre que no fijara su visión en su propia imagen.

También, en la Odisea, Ulises lo busca en el inframundo para saber por qué su regreso a su tierra, Ítaca, es interferido tras muchos años de que terminara la guerra de Troya. Para saber esto, Ulises debe adentrarse en el Hades, hacer sacrificios y hallar a Tiresias entre los muertos.

Adivinación del futuro
La adivinación, o capacidad de prever eventos futuros, en la antigüedad clásica muchas veces era una maldición.

Sin embargo, su intervención más conocida es en la historia de Edipo. Como adivino de Tebas (regida por Edipo) es forzado a señalar quién es el asesino del anterior rey, Layo, pues este crimen no resuelto trajo una mortal peste a la ciudad. Tras largas torturas, Tiresias confiesa que el asesino es el mismo Edipo.

Sobre él y su familia pesaba una terrible maldición. Muchos años atrás, Layo se propasa con Crisipo, un joven dios, y este se quita la vida por vergüenza. La profecía le indica a Layo que su hijo recién nacido mataría a su padre y desposaría a su propia madre (Yocasta).

Tras ordenar la muerte del niño, es hallado en el monte por un pastor. Él lo entrega al rey quien, junto a su esposa, lo cría como propio y lo llaman Edipo (el de los pies hinchados, pues es hallado colgado de los pies en un árbol).

Al crecer, Edipo oye la profecía y huye a Tebas; por accidente, quita la vida de Layo (rey en ese momento) en la carretera. Luego, libera a la ciudad de una maldición y desposa a la viuda reina Yocasta. Tras observar que la previsiones sobre su vida se cumplieron, se quita los ojos con dos largas agujas, y pide que lo destierren para siempre de Tebas. 

Otro personaje con esta maldición es Casandra, sacerdotisa hija de Príamo, rey de Troya. Promete al rey Apolo casarse con él si este le da el don de la profecía. Tras recibirlo, se niega a casarse. Apolo la maldice: podrá prever eventos del futuro, pero nadie le creería jamás. 

La joven cuenta a todos los troyanos, desesperada, que la ciudad caería por un caballo con soldados entrando a la ciudad, pero nadie consideró el relato. Poco después, Ulises ingresa a la ciudad con miles de soldados griegos dentro de un caballo hueco de madera, el inicio del fin de Troya.

La destrucción de Troya con un caballo de madera repleto de soldados fue prevista por Casandra, aunque nadie le creyó.

En la meteorología.

La meteorología es el estudio científico de las condiciones climáticas:

  • Temperaturas
  • Lluvias
  • Humedad
  • Velocidad del viento
  • Presencia de nubes
  • Nivel de presión atmosférica

Al conocer estos elementos, puede preverse, en el corto o mediano plazo, qué cambios habrá en el tiempo y qué hay que tener en cuenta (por ejemplo, granizo, fuertes lluvias y posibles cortes de luz a raíz de ello). 

La sociedad en general accede a este conocimiento a través de quienes son llamados meteorólogos. Ellos, presentes en muchos medios de comunicación para tener más llegada, informan a la sociedad respecto de estos factores, cómo impactarán a lo largo del día, en la semana y dan indicaciones a las personas para que tengan en cuenta.

Como cualquier disciplina que analiza eventos a futuro, la previsión de qué ocurrirá un día determinado no resulta 100 % exacta. Sí, sin embargo, con el avance de la tecnología, estos sistemas están cada vez más calibrados y brindan información muy precisa y orientativa. 

La previsión de los cambios en el clima no es nueva: en la antigüedad se halló un texto de Aristóteles al respecto, y algunos de sus alumnos se adentraron en estos estudios también.

No es sino hacia el siglo XVIII que el avance en el conocimiento científico logró poner sobre la mesa algunos de los conceptos más elementales, cuál es la interrelación entre ellos y cómo leer estos fenómenos para poder prever los cambios meteorológicos

Citar este artículo

Fernández, A. M. (29 de marzo de 2023). Definición de previsión. Tipos, rasgos y ejemplos. Definicion.com. https://definicion.com/prevision/