Se utiliza la expresión pintura rupestre para denominar a un tipo de representación gráfica realizada hace miles de años sobre la piedra, generalmente, dentro de cuevas. El término rupestre hace alusión a aquello relativo o perteneciente a las rocas (en latín, rupes).

Estas manifestaciones artísticas son sumamente antiguas, se remontan a la prehistoria, al igual que los petroglifos (dibujos grabados, hechos en superficies duras). Estas dos técnicas integran lo que se conoce como arte rupestre. A este arte se lo considera como uno de los primeros lenguajes de la historia, puesto que se trata de la forma más antigua de expresar conceptos de modo perdurable.

No existe una explicación definitiva sobre la motivación principal que perseguían los seres humanos del período paleolítico y neolítico para llevar a cabo tales ilustraciones. Hay quienes creen que plasmaban escenas de la vida cotidiana, aunque otras posturas se inclinan por la presencia del simbolismo. Muchos investigadores sostienen la temprana existencia de un tipo de arte figurativo, o la búsqueda de representación de historias ficticias y de cuestiones de raíz mágica y religiosa, como lo eran los rituales para favorecer la caza.

Las imágenes más frecuentes de este estilo de expresión artística varían de un período histórico a otro, pero, en términos generales, se relacionan con figuras humanas, animales, vegetación, divinidades, figuras geométricas, objetos y partes del cuerpo como las manos. Entre los animales, los más comunes en esta clase de arte son los bisontes, los caballos, los ciervos, los mamuts y los leones. Cabe aclarar que las representaciones de individuos y las marcas de las manos, por ejemplo, corresponden al período Neolítico.

Como dijimos, el soporte utilizado era la piedra, ya sea en cuevas, cavernas o paredes rocosas reparadas. Ello ha permitido que perduren a lo largo de la historia de la humanidad, manteniéndose protegidas de la erosión y conservándose dignamente a pesar de que hayan transcurrido aproximadamente cuarenta mil años desde su realización.

Por su parte, los materiales empleados para llevar a cabo las pinturas consistían en pigmentos naturales de origen mineral, vegetal y animal, tales como el carbón, los fluidos del cuerpo, arcilla, polvo de piedras (como hematita y magnesita), grasas, etc. De esta manera, se obtenían colores, entre los que predominaban los tonos del negro, el rojo, el amarillo y el marrón. Generalmente, se utilizaban las manos para dibujar, aunque también podían valerse de piedras o pequeños elementos de la naturaleza para producir algún tipo de efecto.

Cueva de las Manos, en Argentina.
La Cueva de las Manos, en la Patagonia argentina, alberga pinturas rupestres de excelente conservación.

Descubrimiento de la pintura rupestre.

El descubrimiento de las primeras pinturas rupestres se remonta a finales del siglo XIX, de la mano del naturalista español Marcelino Sanz de Sautuola, en la Cueva de Altamira, ubicada en Santander, España. Más específicamente, el hallazgo sucedió en el año 1879, cuando Marcelino exploraba una cueva de su provincia natal junto a su hija de ocho años. Al parecer fue la pequeña María quien alzó la mirada al techo y se sorprendió con los extraordinarios dibujos de bisontes plasmados en él.

Hay quienes hacen un paralelismo con la famosa bóveda de la Capilla Sixtina: en el ámbito del arte rupestre, el techo de la cueva de Altamira es tan valioso como aquella obra maestra renacentista de Miguel Ángel. Lo cierto es que, cuando este descubrimiento se hizo público poco después, a la comunidad científica le llamó poderosamente la atención el nivel artístico que habían alcanzado los seres humanos de la era prehistórica. De hecho, en una primera instancia surgieron muchas dudas sobre la autenticidad de la pintura rupestre en la Cueva de Altamira, puesto que se pensaba que esta clase de obras no eran acordes a las aptitudes mentales y técnicas de los sujetos de dicha etapa histórica.

Más tarde, todas estas inquietudes y consideraciones erróneas sobre las capacidades de los habitantes prehistóricos serían evacuadas a partir de los descubrimientos de nuevas manifestaciones rupestres en regiones españolas y francesas, tales como las Cuevas de Lascaux y Chauvet, cuyo origen se remonta a la etapa transicional entre el período Paleolítico y el Neolítico.

Representaciones de seres humanos y animales sobre piedra.
Los animales representan unas de las figuras más frecuentes en este tipo de arte, sobre todo los bisontes, caballos, ciervos, mamuts y leones.

Ejemplos de pinturas rupestres.

Como dijimos, los primeros hallazgos de pinturas rupestres tuvieron lugar en Europa, sin embargo, es posible encontrar esta variedad de manifestaciones prehistóricas en otras partes del mundo, distribuidas -a excepción de la Antártida- en la totalidad de los continentes. Algunas de las representaciones rupestres más destacadas y analizadas fueron plasmadas en las siguientes cuevas:

  • Cueva de las Manos (Argentina): Ubicada en la Patagonia argentina, más específicamente en la Cuenca del Alto Río Pinturas, al noroeste de la provincia de Santa Cruz. Se estima que la zona fue habitada por seres humanos de la prehistoria durante nueve mil años. Las imágenes que pueden apreciarse tienen que ver con la caza, animales, abstracciones y, como su nombre lo indica, múltiples huellas de manos en negativo. Fue declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO, destacando la antigüedad, la calidad y la conservación de este conjunto pictórico y la conmovedora belleza de su entorno.
  • Cueva de Altamira (España): Se encuentra en la provincia española de Santander, en la Comunidad Autónoma de Cantabria. Las pinturas rupestres que acoge fueron descubiertas en el año 1868, y el origen de las mismas se remonta al Paleolítico. Se cree que la cueva fue ocupada durante más de veinte mil años hasta que su entrada fue bloqueada tras unos derrumbes.
  • Cuevas de Lascaux (Francia): Esta cueva fue hallada de causalidad en el año 1940 cuando un grupo de cuatro jóvenes merodeaba por la zona, en el suroeste francés, buscando al perro de uno de ellos. Los cuatro chicos descubren una abertura que llamó su atención. Al poco tiempo regresan al lugar con la idea de agrandar el agujero y dan con la cueva y las maravillosas pinturas rupestres plasmadas en ella, tales como figuras de toros, caballos y otros animales.
  • Cueva de Chauvet (Francia): También ubicada en el sur de Francia, esta cueva fue descubierta a finales del siglo XX y declarada Patrimonio de la Humanidad en 2014. Las representaciones plasmadas en ella se asocian a la fauna de la Prehistoria: mamuts, leones, diversos mamíferos rumiantes y caballos, entre otras especies.
  • Cueva de Magura (Bulgaria): Ubicada al noroeste de Bulgaria, se trata de una de las mayores cuevas de Europa, abarcando una superficie de 3,6 km. Se estima que las pinturas rupestres fueron realizadas hace más de cuarenta mil años, aunque datan de distintas épocas. Las mismas representan mujeres danzando, hombres dedicados a la caza, fauna diversa, figuras de espíritus y cuerpos celestes, además de utensilios y vegetación.
Pinturas rupestres sobre la piedra, dentro de cuevas.
El soporte utilizado para las pinturas rupestres es la piedra, sobre todo en cuevas o cavernas.

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Lehrer, L. (26 de septiembre de 2022). Definición de pintura rupestre. Su descubrimiento y los ejemplos más destacados. Definicion.com. https://definicion.com/pintura-rupestre/