El término parámetro se emplea para hacer referencia a una característica que sea pasible de ser utilizada en orden a categorizar o definir un sistema específico. De un evento, objeto, proyecto o situación, se toma uno de sus elementos, y desde allí se procede a evaluarlo.

Por ejemplo, a la hora de regar una huerta, se puede tomar en cuenta el parámetro de la cantidad de agua que cada planta necesita y la frecuencia con la que, idealmente, ha de recibirla. O también podemos hablar de ciertos estudios médicos, como el de la presión arterial, que evalúan una realidad particular (la presión de cada paciente) en función de un parámetro general (lo que se ha estudiado y es considerado como la presión normal o adecuada).

En esta acepción general, se trata de un sustantivo masculino que se refiere al dato que se toma como ángulo de visión a la hora de evaluar un fenómeno a fin de comprenderlo mejor. En la vida cotidiana constantemente estamos usando parámetros para evaluar o valorar realidades, y es a partir de ellos que comparamos o formulamos todas nuestras predicciones.

Pero la palabra parámetro presenta, también, otras acepciones más específicas en disciplinas diversas, entre ellas: las matemáticas, la estadística, la programación informática, la lógica, la lingüística o la música. Es importante que distingamos cada una de ellas, ya que tener claridad sobre los matices que las diferencian es, en sí mismo, un acercamiento a partir de los parámetros adecuados a sus universos particulares.

La etimología del término “parámetro”.

Desde el acercamiento etimológico, podemos decir que el término proviene del griego antiguo, y se halla compuesto por para (“fuera de”, “aparte de”, como en paramédico o paranormal) y por métron (“medida”, “medida de las cosas”, como en kilómetro o termómetro). La idea central era la de referirse a “aquello que iba a un lado de otra cosa a fin de medirla o compararla con otras”.

El término fue recogido en el francés como paramëtre, y como parametrum latín científico.

Existen parámetros de presión arterial.
Los parámetros normales de la presión arterial varían según la edad del paciente.

Los parámetros en las matemáticas.

En la acepción específica del ámbito matemático, se entiende al parámetro como el valor que ya es conocido en una función, y está incluido en ella. Por ejemplo, si se quisiera evaluar el volumen de agua que hay en un estanque de tamaño irregular, pero supiéramos que el agua ha ingresado solamente por una manguera que lo alimenta a razón de 100 litros por hora, este dato sería el parámetro, a partir del cual, con el simple cálculo de la variable (horas), contaríamos con la información.

Los parámetros en la estadística.

En cuanto a los parámetros en la estadística, son aquellos que se obtienen a partir de una función aplicada sobre los valores que revela el estudio en una comunidad. Es una cifra abstracta, que representa el ideal medio y nos permite realizar un modelo de la realidad.

Por ejemplo, el promedio que suele realizarse en cuanto a la edad de ciertas poblaciones: se suman todas las edades, se dividen por la cantidad de personas que fueron consideradas, y eso nos da la cifra abstracta que es un promedio de todas ellas. No es la realidad, pero es un modelo que nos brinda un acercamiento a ella, ya que estudiar individualmente un número grande de datos termina por ser impracticable.

Estas pruebas a base de parámetros que se desarrollan en la estadística son muy útiles a fin de analizar, comparar y tomar decisiones en o referente a la población, pero, como en todo ejercicio estadístico, mientras mayor sea la cantidad de datos que se procese e integre, más preciso será el resultado que se arrojará.

El parámetro estadístico indica el ideal medio.
En estadística, el parámetro es una cifra abstracta que representa el ideal medio y permite realizar un modelo de la realidad.

En la programación informática.

En lo que se refiere a la programación informática, se dice que un parámetro es un medio que se emplea a fin de expandir las variables de funciones locales a funciones diferentes, y que también habilitan la posibilidad de generar comunicación entre las funciones.

Si establecemos una rutina que nos devuelva los números impares de una lista, aguardará que enviemos esos valores como parámetro, a fin de poder hacerlo.

En ciertos lenguajes de programación, se puede establecer que algunos parámetros tengan un carácter opcional, en cuyo caso se les asigna el valor por defecto (siempre que el programador prefiera no pasarlos).

Lo cierto es que los parámetros son fundamentales a la hora de programar, porque son muy prácticos: hay algunas funciones destacadas que esperan doce parámetros, y si ocho de ellos fueran optativos, no tendría sentido el ir completando cada uno de ellos con valores nulos para desestimarlos cuando son prescindibles.

El sonido tiene cuatro parámetros esenciales.
Altura, duración, intensidad y timbre son los cuatro parámetros esenciales del sonido.

Los parámetros en la música.

Antes de hablar específicamente de los cuatro parámetros de todo sonido, hemos de considerar que en la música se trabaja con dos principios fundamentales: el silencio y el sonido.

El sonido, en primer lugar, es aquella sensación que se percibe por medio del oído, en las variaciones de presión que genera la vibración de los cuerpos sonoros. En general se transmite a través del aire de la atmósfera, que es el medio más habitual de envoltura. El silencio es la ausencia de dicho sonido.

El sonido presenta cuatro parámetros esenciales:

  • Altura:  El primero de los parámetros es la altura. Se trata del resultado en la frecuencia producida por un cuerpo sonoro; o, mejor dicho, se trata del número de ciclos en vibraciones por segundo (hercios, Hz) emitidos. Es a partir de este parámetro que resulta posible definir y clasificar los sonidos en tanto «graves» o «agudos». Porque a mayor frecuencia, el sonido será más agudo (alto). Podemos definir la longitud de onda como la distancia que se mide en la dirección en la que la inda se propaga, entre dos puntos que presentan un idéntico estado de movimiento; o, dicho de otro modo, dos puntos cuyos puntos mínimos y máximos son alcanzados en el mismo momento.
  • Duración:  Al hablar de la duración de un sonido hacemos referencia a al tiempo que las vibraciones duran. Este parámetro está muy relacionado con el concepto de ritmo. La duración está representada en la onda a través de los segundos durante los cuales ésta persista.
  •  Intensidad:  Este parámetro del sonido indica su fuerza, es “la fuerza con la que el sonido se produce”, y dependerá del valor energía. Lo que representa la intensidad en una onda es su amplitud.
  •  Timbre:  Por último, el timbre es aquella cualidad por medio de la cual podemos  distinguir los diversos instrumentos o las voces, aun cuando estén emitiendo sonidos con igual altura, intensidad y duración. En realidad, escuchamos sonidos complejos. Lo que escuchamos es el resultado de una gran cantidad de  sonidos simultáneos, pero en nuestra percepción se revelan como uno solo. El timbre varía según la cantidad de armónicos o según la forma de onda que se presente un sonido y de su intensidad, a lo que nos referiremos como el “espectro”. Si nos imaginamos el dibujo, el timbre se representaría como una onda. Y el sonido puro, por ejemplo  la frecuencia fundamental o un sobretono, se representarían por medio de una onda sinusoidal, y un sonido complejo sería la sumatoria de las ondas senoidales puras. Así, podemos decir que el espectro es la sucesión de unas barras verticales a lo largo del eje de frecuencia, y representan a cada senoide del sobretono, y la altura nos revela lo que terminará aportando cada una al sonido final.

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Lehrer, L. (6 de febrero de 2022). Definición de parámetro. Su aplicación en la matemática, la estadística, la informática y la música. Definicion.com. https://definicion.com/parametro/