Hegemonía es el nombre que recibe el fenómeno mediante el cual algo o alguien ejerce supremacía, de cualquier tipo, sobre otra entidad. Esta preeminencia de un elemento sobre otro u otros permite que esta entidad más fuerte ejerza poder, liderazgo y autoridad sobre las demás. Por este motivo, el término es ampliamente utilizado en el ámbito de la política y la historia, ya que sirve para describir el vínculo entre naciones, culturas y gobiernos.

Del griego ἡγεμονία, hēgemonía, significaba guía o ser jefe, es decir, quien conduce o comanda algo.

Grecia Antigua y la hegemonía militar.

Si contemplamos la historia occidental, el concepto de hegemonía nos permite analizar cómo fue el ascenso y caída, en algunos casos, de algunas de las sociedades con predominio y control, desde aquellos años hasta la fecha.

Desde el siglo VIII a. C. , comienza a tomar forma uno de los ejércitos más poderosos del período clásico griego, y que han pasado a la historia como uno de los más temibles y preparados para enfrentar a sus vecinos. Este era el ejército espartano y, por ende, Esparta se transformó paulatinamente en una de las ciudades más poderosas.

Espartanos
El ejército espartano, a fuerza de ser conocido como un conjunto de soldados temibles, logró darle a Esparta una elevada posición política en Grecia.

Su conflicto con Atenas llega a su punto más alto hacia el 460 a. C. y, a lo largo de varias décadas, de intermitentes y tratados de paz, ambas polis griegas se enfrentaron con violencia por la dominación del Peloponeso. Aunque en un primer momento Atenas logra salir vencedora, hacia el 405 a. C. finalmente los espartanos logran la subyugación de la flota atinente, por lo que Esparta se declara la potencia hegemónica de Grecia.

Fin de la Edad Media y la hegemonía económica colonialista.

Posteriormente, con el fin de la Edad Media, hacia el 1500 d. C., el mapa europeo comienza a cambiar gracias a la llegada a América y otras futuras colonias de África y Asia. Aquí se da inicio a lo que hoy entendemos, propiamente, como colonialismo:

  • control sobre los territorios
  • control sobre los recursos naturales (agua, minerales y otras riquezas)
  • administración gubernamental de las colonias
  • sometimiento religioso, cultural y social

Esto provoca una profunda reconfiguración de las potencias de aquel entonces: España, junto con Portugal, se transforman en dos Estado-nación cuyo poder en territorios de ultramar nunca antes fue visto. Como potencias dominantes, lograron imponer su ideología imperial y su cultura sobre la base de la subordinación de los territorios y habitantes conquistados.

Colonialismo
El colonialismo europeo de fines del siglo XV da lugar a una reconfiguración del mapa político de la época, y construye dos nuevas potencias: España y Portugal.

La influencia lograda, como resultado de largas décadas de batalla contra quienes se resisten en vano a la instauración del imperio y el colonialismo español, posiciona a este país como uno de los más importantes desde el siglo XV en adelante. Sin embargo, con el paso del tiempo otras naciones también comienzan a adquirir colonias y poder y, de este modo, desestabilizan la hegemonía ibérica.

Siglo XX en adelante: la Guerra Fría.

Hacia el siglo XVII, la monarquía de Gran Bretaña y Francia comienza a desplegar un poder ascendente que provocará, con el paso del tiempo, la caída de España como potencia. Luego, hacia el siglo XX, otra de las naciones con mayor poder es Estados Unidos: inicialmente constituida como un conglomerado de trece colonias británicas, logra su independencia hacia el año 1776.

Con esto, da inicio al primer gobierno democrático en territorio americano, y a su vez abre camino a la soberanía de las demás naciones del continente, cuyas luchas independentistas continuaron hasta principios del siglo XX.

Sin embargo, también se comienza a construir como una de las principales potencias hegemónicas: tras independizarse, da comienzo a una expansión territorial que la lleva a comprarle territorios a potencias como Francia (Luisiana) o España (la Florida), y a construir redes de ferrocarriles para trasladar de un punto a otro del mapa sus recursos, como el oro.

Durante el siglo XX, además de la Primera Guerra Mundial, las potencias europeas se enfrentan en la Segunda Guerra Mundial: esto, junto con el ascenso del orden comunista desde 1919 en la antigua Rusia zarista, provoca fuertes enfrentamientos entre comunistas y capitalistas.

El conflicto, conocido como la Guerra Fría (período de desarrollo de arsenal bélico en ambas naciones aunque nunca llegaron a atacarse), se extendió hasta la década del 90. El mundo, dividido en dos bloques, cuyo máximo símbolo es el Muro de Berlín que dividía el occidente capitalista y el oriente comunista, vio caer el bloque comunista en 1990 y, con esto, la consolidación de los Estados Unidos como principal potencia mundial.

Rusia y EE. UU.
El conflicto entre Rusia y Estados Unidos enfrenta a ambas potencias en la denominada Guerra Fría, conflicto que no tuvo lugar pero que da cuenta del peligro de un posible enfrentamiento entre ambas potencias.

Tipos.

La hegemonía política, por una parte, es el dominio que una nación ejerce sobre otra, por lo general como resultado de una conquista del territorio. Estos conflictos suelen extenderse durante muchos años, hasta que una nación logra imponerse sobre otras, sobre la base del intervencionismo y, también, la hegemonía económica.

Esta puede entenderse como el control de los recursos que un país tiene: por este motivo, puede disponer de estos elementos como desea ya que, en tanto en cuanto también ejercen poder político, pueden administrarlos.

También, la hegemonía económica se manifiesta cuando una entidad monopoliza una industria o un comercio, lo que le da ventaja sobre otras entidades que también quieren comercializar sus productos y no pueden.

Un concepto interesante: la hegemonía cultural.

Por otra parte, la hegemonía cultural puede entenderse como una forma de dominación mediante la cual la perspectiva y el punto de vista de una clase dominante se impone como la única válida, la universal y, por ende, como la verdad.

Este concepto, explorado por diferentes autores entre ellos Antonio Gramsci (1891-1937) sociólogo italiano, es interpretado como una estrategia de control con la que la posición ideológica de un grupo triunfa,. Esto implica que hay una única forma de interpretar valores, costumbres, normas sociales y reglas (lo permitido y lo no permitido). Todo lo que se oponga o contradiga estas normas instauradas se considera una amenaza al orden social.

Consecuencias y efectos.

Pluralismo y diversidad
Es posible construir comunidades y sociedades donde diferentes costumbres, culturas e idiosincrasias convivan de forma amigable y respetuosas de las diferencias.

Uno de los efectos que la hegemonía tiene sobre las sociedades y las personas es que intenta homogeneizar los paradigmas o la forma de ver el mundo. Se difunden una serie de valores, costumbres y perspectivas, legitimadas a través de instituciones que validan esa perspectiva unificadora. Esta difusión puede hacerse a través de lo que los medios de comunicación señalan, por ejemplo, o a través de lo que se enseña, a través de la cultura, incluso, como la literatura o las obras cinematográficas.

Desde siempre, sin embargo, ha habido resistencias a estas únicas formas de entender y ver el mundo, lo que ha llevado a movimientos de contra-hegemonía que apuntan a la descentralización de ese poder cultural, económico y político. Cuando hay un único discurso dominante, la aparición de resistencias que muestren otras formas de pensar son esenciales para una sociedad más pluralista y menos desigual.

Citar este artículo

Fernández, A. M. (31 de octubre de 2023). Definición de hegemonía. Historia, tipos y rasgos. Definicion.com. https://definicion.com/hegemonia/