Supervisión es un vocablo que deriva del latín super y videre, cuyo significado es «mirar por encima». Es una actitud de vigilancia y de inspección superior. La palabra supervisión refiere al acto o efecto de supervisar. Asimismo, supervisar es inspeccionar el trabajo que realizan otras personas. Alude a «mirar desde arriba», es decir, a observar y controlar una labor o una tarea desde una posición más global. Esta acción la desarrolla alguien denominado supervisor que, por diversas razones, ocupa un rol superior, lo que le permite observar, controlar y analizar la labor de los individuos que ejecutan una actividad concreta.

Según las ciencias sociales, la supervisión es una habilidad para dirigir el trabajo de un grupo de sujetos. El propósito de dicha dirección es lograr la máxima eficacia y, además, una satisfacción colectiva al desarrollar una tarea de manera correcta. Es entendida como un proceso sistemático en el que se controla, evalúa, orienta y asesora una labor.

Asimismo, la supervisión puede ser tanto de carácter administrativo como de carácter educativo. Son los espacios donde una persona puede realizar la tarea de control de los demás, pues no solo tiene autoridad para hacerlo, sino que, además, conoce los mecanismos para mejorar el rendimiento de los equipos de trabajo y, por lo tanto, potenciar la competitividad y la calidad de lo que se ofrece.

supervisión empresa
En una empresa, supervisar al personal es garantía de éxito.

Clasificación de la supervisión.

Existen tres tipos de supervisiones o, mejor dicho, tres grandes campos de acción de la supervisión. Ellas son:

  • Supervisión administrativa
  • Supervisión educativa
  • Supervisión de apoyo

La idea de una clasificación de la supervisión supone un trabajo de evaluación sistemático. Pero para poder desarrollar una supervisión correctamente es crucial antes detectar o establecer los objetivos de la misma. En este marco se deben plantear los siguientes puntos:

  • Definir qué se quiere lograr
  • Establecer la ruta de control
  • Detectar fallas en el proceso de trabajo

Supervisión administrativa.

La supervisión administrativa se refiere a la gestión propiamente dicha de una organización o de una empresa. Se vincula con una técnica, la misma que evalúa que dicha entidad o compañía realice su labor en función de su objetivo principal. Este se encuentra plasmado en la estructura organizativa (organigrama). En dicho esquema, el rol que ocupa el supervisor es el central y está ubicado en la parte superior, por encima del nivel operativo e, incluso, gerencial.

En esta clase de supervisión se controla el funcionamiento del personal, sobre todo, para garantizar una mejora de los servicios que se brindan a los clientes o a los diferentes tipos de usuarios.

Asimismo, este supervisor tiene el rol de contratar nuevo personal y de ponerlo en conocimiento de su tarea para comenzar a ocupar un puesto de trabajo específico. Del mismo modo, planifica la labor de todos los empleados, dirige, revisa y controla los procesos, distribuye información de importancia y genera cambios en caso de que sean necesarios.

Entonces, podemos decir que el supervisor administrativo está por encima de los jefes pero por debajo de una estructura de dirección. El supervisor es responsable del trabajo de sus supervisados.

Supervisión educativa.

La supervisión educativa parte de la base de que enseñar y reforzar el conocimiento de la gente es fundamental para la vida en sociedad. Esto aplica tanto para niños y niñas como para adolescentes y adultos. Podemos encontrar un supervisor educativo tanto en una institución educativa propiamente dicha, como también en una organización en la que este funcionario controlará el nivel educativo del personal. Esta tarea la realizará con la intención de detectar necesidades y de potenciar los saberes de los trabajadores.

En lo educativo, como ámbito de clases, el supervisor se centra en la formación de los y las estudiantes. Para lograrlo no solo lleva un control de las escuelas de una zona geográfica en particular, la cual corresponde a su jurisdicción, sino que, además, hace visitas periódicas para asegurar que los procesos se están desarrollando de acuerdo a un plan educativo superior.

En una organización, el supervisor también puede ejercer una tarea educativa, más que nada profesional. Esto quiere decir que colabora en la formación académica de los trabajadores para mejorar su labor y potenciar su rendimiento. Esto tendrá como resultado mayor eficacia y una identidad profesional mucho mejor.

supervisión educativa
En las instituciones educativas se supervisa la labor docente, pero también la calidad educativa.

Supervisión de apoyo.

La supervisión de apoyo se vincula con la supervisión educativa, pero desde el ámbito profesional. Tiene la función de acompañar los procesos de trabajo para colaborar con un sujeto que, por diversas razones, necesita ayuda para mejorar su función o, simplemente, complementarla.

Este tipo de supervisión, a veces, cumple un rol de contención psicológica. Es decir, se interesa por los procesos personales de los trabajadores que, de alguna u otra forma, influyen en la tarea diaria. Entonces, mientras más contención reciban, habrá menos riesgos de que ocurran situaciones complejas como, por ejemplo, un accidente laboral.

Aplicación de la supervisión.

La supervisión puede aplicarse de diferentes modos o, como se denomina, niveles. Básicamente, encontramos cuatro espacios de aplicación:

  • Profesional: se aplica a profesionales que cuentan con conocimiento académico y que, además, poseen las herramientas para desarrollar una labor. Este nivel de aplicación tiene como propósito que las personas mejoren su calidad profesional y así, perfeccionen sus tareas.
  • Estudiantil: es un tipo de aplicación en el que se busca que los y las estudiantes aprendan el método inductivo-deductivo que les permite desarrollar con mejor calidad su proceso de formación educativa.
  • Equipos: la supervisión pretende unir equipos interdisciplinarios para potenciar un objetivo en común. El objetivo es enriquecer los procesos de trabajo de una organización o empresa y que todo el personal persiga un mismo propósito.
  • Voluntarios: se refiere al tipo de formación que reciben aquellas personas que participan en acciones que humanizan a los usuarios.
supervisión operario
Una buena supervisión asegura un trabajo de calidad.

Técnicas de supervisión.

La supervisión se desarrolla a través de ciertas técnicas. Si bien existen muchas, vamos a enumerar tres de las más conocidas.

  • Individual-grupal: se trata de una clase de supervisión en la que se reconoce las necesidades de las personas y se las capacita para mejorar en sus tareas técnicas. Además, es una técnica para afianzar las relaciones humanas y así, evitar enfrentamientos, discusiones o conflictos que podrían entorpecer la labor diaria.
  • Formal-informal: pretende instalar entre los individuos un espíritu de equipo. Para ello suelen realizarse encuentros en los que los sujetos se vinculan de otro modo para interactuar entre sí y potenciar los vínculos.
  • Directa-indirecta: este tipo de supervisión tiene que ver con la presencia o no del supervisor. Puede darse que este superior no esté presente entre los miembros de trabajo y, aun así, cuente con herramientas para el análisis de los procesos laborales.

Tarea de supervisar.

La tarea de supervisar se lleva a cabo con total normalidad, más que nada para no alterar el funcionamiento de los operarios.

Se trate de un establecimiento educativo o de una organización o empresa, el supervisor debe tener la capacidad de observar los hechos tal cual son y tal cual ocurren en la cotidianeidad. Esto quiere decir que nada debe ser alterado, pues un simple cambio podría perjudicar a todo el sistema de trabajo y, por lo tanto, a los resultados del mismo.

Citar este artículo

Navicelli, V. (1 de junio de 2022). Definición de supervisión. Clasificación, aplicación y técnicas. Definicion.com. https://definicion.com/supervision/