Definición de estado de sitio

Con estado de sitio hacemos referencia a un régimen de excepción que se pone en marcha en una situación estatal de carácter extraordinario. Se da en contextos considerados de extrema gravedad y es el poder ejecutivo de un país el que determina o da la orden de este tipo de establecimiento.

Esta medida excepcional que toma el ejecutivo se lleva a cabo a través de las fuerzas armadas del país que entra en estado de sitio. El propósito de este régimen es lograr la estabilidad nacional, considerada perdida por diversas causas. Básicamente, el fin es restablecer el orden.

Para instalarse un estado de sitio en el territorio de una nación, esta medida debe ser aprobada por el poder legislativo. Es decir, debe recibir la mayoría de la adhesión y, además, no puede aplicarse en forma arbitraria.

La implementación de este régimen, supone la suspensión total de derechos considerados como fundamentales. Asimismo, las fuerzas armadas y el gobierno son los responsables de restablecer el orden nacional a través de una serie de estrategias que varían de acuerdo al contexto.

Un dato a destacar es que, la constitución de cada país queda supeditada al estado de sitio, simplemente, porque es similar que declarar una situación de guerra. Por ello, las fuerzas armadas o de seguridad toman un gran protagonismo y reciben facultades extraordinarias. Entre ellas podemos nombrar la aplicación de acciones represivas, con la intención de lograr la paz social y minimizar la violencia.

A lo largo de la historia, muchos países del mundo han declarado estado de sitio en sus territorios como, por ejemplo, México, España, Chile y Argentina. Siendo estos casos concretos de rebeliones sociales, desaparición de personas, secuestro y tortura.

Declaración de estado de sitio.

Como bien mencionamos anteriormente, este tipo de régimen de excepción es declarado por el poder ejecutivo de un país, bajo la forma de decreto. Es decir, es el presidente el que tiene las facultades para ejecutar un estado de sitio. En algunas naciones alcanza con esta medida, mientras que, en otras, se requiere la aprobación -por parte de la mayoría- del poder legislativo.

Este régimen de excepción permite al país enfrentar cualquier tipo de situación considerada como peligrosa o de gravedad y que rompe con el orden interno del territorio. Es por ello que se ejecutan medidas extremas que tienen que ver con poner límite a los derechos y deberes de los ciudadanos.

Una vez declarado el estado de sitio, son las fuerzas armadas las que, en concreto, operan este límite de facultades ciudadanas. Es decir, como las garantías constitucionales quedan suspendidas, los grupos de seguridad están autorizados a realizar prácticas represivas ante aquello que consideran como falla al orden social.

Causas de un estado de sitio.

Las causas de un estado de sitio pueden ser diversas, sin embargo, los motivos que originan el decreto dependen del tipo de gravedad social que provocan. Pero, básicamente, podemos enumerar las siguientes:

• Guerra civil
• Insurrección armada
• Ataque a la integridad territorial
• Invasión bélica externa
• Agresión a la soberanía

Los hechos enumerados anteriormente desencadenan una serie de manifestaciones que ponen bajo amenaza el orden social y, según lo que argumentan los ejecutivos, ponen en peligro a la ciudadanía nacional. Por ello, se ejecuta una estrategia represiva por parte de las fuerzas armadas avalada o aceptada por el ejecutivo nacional. Estas medidas se llevan a cabo siempre y cuando cumplan con requisitos necesarios para su aprobación por parte del cuerpo legislativo.

Lo anteriormente expuesto nos lleva a sintetizar que, entre los motivos por el cual es ejecutivo puede declarar el estado de sitio, se destacan las situaciones que provocan una fuerte conmoción interna, pero también puede ser externa.

Alteración del orden externo.

Este tipo de situaciones están vinculadas con una guerra o con una invasión al Estado. También se la denomina guerra internacional.

Nos referimos a un tipo de ataque o conflicto exterior que puede ser físico o económico. En caso de ser necesario o de encontrarse el país en estado de emergencia, el presidente puede declarar el estado de sitio, no con miras represivas, sino más bien, en forma preventiva.

Conmoción interna.

Por su parte, con conmoción interna hacemos referencia a cualquier situación que provoque un cambio en el orden público. Más bien, altere el campo social, provocando disturbios o desplazamientos peligrosos para la sociedad. Esto ocurre cuando algunos ciudadanos desarrollan ciertas acciones o comportamientos que rompen con el orden social al quebrantar leyes establecidas.

Pero, para implementar un estado de sitio, el infringir las normas debe ser considerado como un hecho de extremo peligro y suponer conductas fuera de las aceptadas. Nos referimos a, por ejemplo, rebeliones civiles, insurrecciones armadas, hechos de agresión civil, etc.

Son muchos los países del mundo que se han visto obligados a establecer un estado de sitio por diversas razones, siendo la más común el de conmoción interna. Las medidas establecidas por dichos países estuvieron relacionadas con tácticas represivas que, en muchos casos, desembocaron en desaparición de ciudadanos, secuestros, torturas; entre otras.

Muchas de estas medidas han sido repudiadas por las sociedades, las mismas que exigen un Estado responsable y protector de sus ciudadanos, sin llevar a cabo medidas que generen violencia.

Consecuencias de un estado de sitio.

Las consecuencias del estado de sitio estarán directamente relacionadas con las estrategias establecidas por el gobierno que lo declaró, pero, sobre todo, por los mecanismos de acción de las fuerzas armadas de dicho país. Recordemos que la Constitución queda completamente suspendida, es decir, los derechos y deberes de los ciudadanos son limitados.

Este tipo de mecanismo es cuestionado, sobre todo, por limitar las libertades, pero, además, por implementar medidas que, en algunas ocasiones, se ha caratulado como una falta a los mecanismos legales.

Entre las consecuencias principales del estado de sitio podemos mencionar:

Consecuencias económicas

La economía es uno de los puntos que más se ve resentido cuando se aplica en un país un estado de sitio, esto se debe a que desciende considerablemente el motor que genera dinero a un territorio. Por nombrar solo uno de dichos motores económicos, el turismo. El impacto en las medidas de seguridad nacional es tan grande que la gente deja de movilizarse por el territorio, sencillamente, porque no pueden hacerlo, pero, además, por temor.

Las medidas que desencadenan el estado de sitio también provocan confinamiento, por lo cual, los negocios o empresas vinculadas con el mercado comercial, cierran sus puertas. Esto provoca, obviamente, una reducción importante en los ingresos.

Asimismo, el estado de sitio genera una visión nacional de desestabilización, lo cual repercute en la imagen que el país brinda al exterior. Es decir, se transforma en un destino poco seguro y, por tanto, la inversión extranjera disminuye.

Consecuencias sociales

En cuando a las consecuencias sociales, estas son las más fuertes, pues son las que perduran en el tiempo. Y aquí podemos mencionar dos tipos:

• Por un lado, los individuos capturados por la fuerza militar son juzgados por cometer delitos que alteraron el orden público.
• Por otro lado, las medidas represivas llevadas a cabo por la fuerza militar, en algunos países, han tenido como consecuencia un gran número de ciudadanos torturados y asesinados, mientras que otros aún están desaparecidos. En Argentina, por ejemplo, el número de personas desaparecidas durante la última dictadura militar, asciende a 30000, mientras que son alrededor de 400 los niños que fueron secuestrados y que aún no conocen su identidad.

Citar este artículo

Navicelli, V. (4 de abril de 2022). Definición de estado de sitio. Declaración, causas y consecuencias. Definicion.com. https://definicion.com/estado-de-sitio/