Definición de objeto de estudio

Para empezar a comprender el concepto de objeto de estudio podemos decir que suele utilizarse en el ámbito de la investigación para referir a aquel tema sobre el cual se quiere trabajar. A continuación detallamos su significado y algunos elementos que ayudan a conformarlo.

Antes de profundizar, y como herramienta para entender esta idea con más detalle, veremos cuál es el origen etimológico de cada una de las palabras que componen esta expresión: objeto y estudio.

Etimología de objeto.

Rastreando el origen de objeto nos encontramos con que este término surge del latín objectus u objec, vocablo que se compone por el prefijo ob-, el cual se interpreta como “encima”, y el verbo iacere, cuyo significado puede explicarse aludiendo a la idea de lanzar una determinada cosa, poner algo frente a uno.

Etimología de estudio.

El origen de estudio lo hallamos en el latín studium, lo que puede traducirse como aplicación, cuidado e, incluso, celo. A modo de breve definición podemos decir que estudio es la práctica por la cual se adquieren nuevos conocimientos que posibilitan el desarrollo de diferentes actividades o habilidades. Otra forma de explicar su sentido es refiriendo al esfuerzo y trabajo que se dedican a conocer, memorizar o aprender algún tema en particular.

Usos del objeto de estudio.

Retomando el concepto que nos compete principalmente, una manera de detallar la definición de objeto de estudio es haciendo foco en el contenido que pretende estudiarse, conocerse o desarrollarse en profundidad. Para describirlo de modo breve, el objeto de estudio explicita qué es aquello sobre lo que se quiere saber. Se emplea este término dentro del campo de las ciencias al momento de definir de qué va a tratarse un trabajo de investigación, como puede ser una tesis o una monografía. Vale remarcar que poder delimitar con claridad el tema a trabajar es de mucha ayuda para luego poder definir qué método es el mejor para el caso, desde qué punto de vista conviene abarcarlo y qué pasos a seguir son los necesarios para llegar al resultado esperado.

El objeto de estudio también es llamado en ocasiones “realidad material estudiada”, es el conjunto de hechos observables que son abarcados dentro de una teoría o para desarrollar un trabajo.

Materia de conocimiento.

Si recurrimos a la primera acepción encontrada en el Diccionario de la Real Academia Española, es posible definir como objeto de estudio a todo hecho o fenómeno con la facultad de ser materia de conocimiento. Es decir, es aquello cuyas características podemos conocer dedicándole tiempo de investigación. Es interesante remarcar que, en cierto modo, si se define algo de esta forma implica, quizás, que ese tema no es aún algo conocido en detalle y que justamente por eso es que se elige como objeto de nuestro trabajo, para acceder a más información al respecto.

Se origina, generalmente, partiendo de una determinada problemática que necesita ser resuelta, una inquietud o una duda que busca ser aclarada. Muchas veces, también, nace a partir de una dificultad de orden más práctico para la cual se debe buscar una solución a través de la experimentación. El punto de partida proviene del interés de quien investiga o de alguna persona que encarga a otros dicha investigación.

Objeto de estudio en la investigación científica.

Otra forma posible de definir el objeto de investigación es aludiendo a la porción finita -por ser un tema delimitado que en algún momento se termina- que se estudia de la realidad para después generar una transformación, un cambio, o ampliar la base de datos ya existente del tema aportando nuevos descubrimientos. Aquí podemos remarcar que es imposible transformar aquello que no se conoce, ni trabajar sobre un área que no se haya investigado.

Un aspecto que resulta conveniente destacar es la importancia de que, al momento de definir el objeto de estudio, este no sea abarcativo por demás. Lo mejor es especificar el tema lo más que se pueda para que el trabajo al respecto no se vuelva muy engorroso ni se extienda demasiado en el tiempo. Hay que tener en cuenta que, tanto para una tarea escolar como para un trabajo de investigación académico, por poner algunos ejemplos, suele haber un tiempo limitado. Además, es más valorable desarrollar un tópico concreto con la mayor cantidad de detalles y profundidad posibles, a exponer de forma vaga muchos datos sobre distintos asuntos relacionados.

Cómo determinar un objeto de estudio.

La elección del objeto de estudio varía y suele surgir de los intereses de quien vaya a realizar la investigación o el trabajo. Por lo general se establece que para poder determinar el tema con claridad es necesario tener a consideración los elementos que nombraremos a continuación. Para ejemplificar, podemos pensar en una temática de estudio e ir acotándola a medida que avancemos en cada ítem.

• Lo primero que hay que definir es el elemento puntual que se va a investigar. Pongamos, a modo de ejemplo, al arte. De ahí pasamos al tipo de arte; visual. Dentro de esa área, más específicamente, el cómic.

• Una vez definido el tema central, podemos focalizar en un punto de vista o característica respecto de este que ayude a comprender mejor desde dónde abarcarlo; su origen, sus usos, su historia y su influencia, entre muchas otras opciones. Para el ejemplo que estamos utilizando -el cómic- podríamos reflexionar acerca de su desarrollo.

• Otro aspecto crucial es el espacio geográfico donde ubicamos el asunto a trabajar. Digamos, para seguir con el ejemplo, el desarrollo del cómic en Estados Unidos -podría incluso tratarse de un estado o de una ciudad como Nueva York.

• Luego, debemos aclarar el periodo temporal que se va a abarcar en la investigación. El tema señalado como referencia quedaría, entonces, como: “el desarrollo del cómic en Estados Unidos en la década de 1990”.

Fuentes bibliográficas.

Una vez que logremos definir estos cuatro aspectos respecto de la cuestión acerca de la que vayamos a investigar, es posible comenzar a recolectar la data que precisamos. Ahora bien, no está de más antes de decidir el objeto de estudio, evaluar a qué fuentes de información podemos acceder una vez llegado el momento de la investigación propiamente dicha.

Si bien es cierto que, hoy en día, internet y las redes nos acercan a prácticamente cualquier tema, también es real que no toda la información es tan accesible. Muchas veces no hay certeza de que las fuentes sean confiables. Algunos datos pueden no estar actualizados e incluso puede suceder que la temática sobre la que trabajemos requiera elementos generados por nosotros mismos, como entrevistas, encuestas o experimentos. Cuanto más fácilmente podamos acceder a los datos que necesitamos, mejor podremos llevar a cabo nuestro estudio.

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Krause, G. (17 de julio de 2022). Definición de objeto de estudio. Ciencia, academia, fuentes bibliográficas. Definicion.com. https://definicion.com/objeto-de-estudio/