Definición de elementos naturales

Los elementos naturales son todos aquellos que encontramos en la naturaleza, sin que haya intervenido trabajo humano para producirlos. En este sentido, se oponen a aquellos elementos considerados sociales, o también artificiales.

Es común encontrar, junto a los elementos naturales, elementos que han sido construidos por el hombre. Incluso, es muy usual que algunos elementos naturales hayan sido intervenidos por el hombre. Esto ha generado diversos debates en la actualidad, a raíz del uso excesivo que tienen algunos elementos.

Elementos naturales y artificiales.

Para poder examinar con más detenimiento el concepto, consideremos ambas partes de él:

• elemento: es aquella parte que conforma un todo más grande. También, puede definirse como un conjunto de objetos.
• natural: del latín naturālis, significa relacionado con la naturaleza, que es independiente a la intervención humana.

En este sentido, si se considera desde una perspectiva geográfica, encontraremos los siguientes ejemplos: cuerpos de agua, los relieves, el suelo y también los elementos que componen la vegetación.

Se contrapone este concepto al de elementos artificiales (del latín artificiālis, hecho por el hombre, o no natural). Esto se debe a que hubo algún tipo de intervención desde áreas como ingeniería, arquitectura, o construcción de espacios nuevos:

• Si pensamos en un elemento natural como el agua, una construcción relacionada con esto es un dique. Este se construye para contener el paso de agua, y también para reconducirla hacia otros lugares que puedan necesitarla.
• En el suelo, recurso natural, una de las intervenciones humanas es la construcción de carreteras. Esta sirve no solo como vía de comunicación entre dos puntos o más, sino también para que sea el camino destinado a que vehículos circulen.

¿Qué elementos naturales hay?.

Describiremos a continuación los elementos que encontramos en la naturaleza:

Agua.

En primer lugar, tenemos el agua. Es un elemento clave para la existencia humana, y tiene las siguientes características:

• Es un líquido incoloro (sin color), inoloro (sin olor) e insípido (con poco o ningún sabor).
• Se compone de un átomo de oxígeno y dos de hidrógeno.
• Ocupa aproximadamente tres cuartos de la superficie del planeta terrestre.

Podemos hallarla en tres estados: sólido (o congelada), líquido, o gaseoso.

Además de sus propiedades físicas, el agua supone un recurso fundamental para la existencia humana. Por tal motivo, su escasez supone un problema a nivel mundial, pues muchas áreas no tienen acceso a ella. Se trabaja, desde organizaciones de alcance local y también mundial, para tratar de proveer, a esas áreas alejadas, con este recurso.

Suelo.

El suelo, en segundo lugar, es fuente de nutrientes y de agua tanto para humanos como para animales y la vegetación. Es además otro elemento natural.

Tiene la particularidad de ser el espacio del cual nuestra alimentación depende. ¿Qué significa esto? De él crecen las plantas, y de él se alimentan los animales que luego sirven para el consumo. Es un elemento al cual el impacto de décadas de industria están amenazando.

Se utilizan, anualmente, grandes cantidades de pesticidas y fertilizantes para preparar la tierra: esto impacta directamente en la futura producción de nutrientes, y en el suelo en sí.

Flora.

Un tercer elemento natural es la flora: esta es toda la vegetación que crece en un determinado lugar. La flora varía de región a región, pero también depende del tipo de suelo, del tipo de clima o de la cantidad de agua que haya cerca.

Gracias a ella, nos proveemos de muchas de las plantas que son útiles para alimentarnos. Sin embargo, es una de las fuentes más antiguas de donde provienen una gran variedad de recursos medicinales. En este ámbito de uso, pueden encontrarse algunas usadas como energizantes, otras para relajarse o dormir mejor, y otras ayudan a controlar síntomas de alguna enfermedad.

Fauna.

En cuarto lugar, encontramos la fauna. Usualmente, se la denomina fauna autóctona o local, ya que destaca que también los animales son diferentes en función de la geografía, el suelo o el clima.

A grandes rasgos, encontramos algunos grupos en el interior de ella:

• animales que habitan el agua (peces, tiburones, delfines, ballenas, entre otros)
• aves
• insectos

Además de este grupo, encontramos que muchos lugares del mundo tienen leyes con las que protegen animales en peligro de extinción. Esta parte de la fauna, denominada exótica, incluye a todas aquellas especies en peligro de desaparecer. Las razones de este potencial peligro pueden ser tanto el cambio climático como la destrucción de sus hábitats naturales. También son amenazas el tráfico ilegal o la caza masiva de ellos.

En Argentina hay más de 500 especies en peligro; algunas de ellas son el guanaco y la vicuña, el yaguareté, el tatú carreta, y el zorro gris.

Seres microscópicos.

También denominados microorganismos, los seres microscópicos son el quinto grupo de elementos naturales. Aquí incluimos a los hongos, los virus, y las bacterias. Como el prefijo micro lo sugiere, son los seres vivos más pequeños, y para observarlos es necesario tener recursos especiales (microscopios).

Son un grupo cuya característica es la velocidad de reproducción que tienen. Además, son una parte fundamental de los procesos de, por ejemplo, descomposición de residuos orgánicos y la generación de nutrientes (en el suelo).

Sin embargo, pueden ser también peligrosos para los humanos, y ocasionar enfermedades.

Aire.

En sexto lugar, encontramos el aire, compuesto gaseoso cuya utilidad para la vida humana es fundamental. Tiene múltiples componentes: principalmente nitrógeno, y luego oxígeno, argón, dióxido de carbono y vapor de agua, entre otros.

No podemos vivir sin él, y por eso su cuidado es de vital importancia para la vida humana. Esta es la razón por la que se ha tratado de concientizar a la población en general respecto de cómo, año a año, la contaminación ambiental aumenta.

Una exposición a largo plazo de los humanos y otros seres vivos, al aire contaminado, puede tener efectos nocivos:

• Afecta los pulmones y disminuye nuestra capacidad pulmonar;
• Aumenta las posibilidades de tener bronquitis, o asma;
• Pueden generarse problemas en la sangre;
• Aumenta la posibilidad de cáncer (de piel, por ejemplo, o en los pulmones), entre otros.

Elementos naturales para orientarse.

Durante mucho tiempo, cuando no se contaba con brújulas o mapas que permitieran saber dónde se estaba parado, se recurría a la naturaleza como guía. Si bien hoy ese problema se soluciona rápidamente gracias a un GPS en nuestros teléfonos móviles, antiguamente existían otros métodos.

Los elementos naturales, en este sentido, eran claves para el sentido de la orientación. Su uso es resultado de miles de años de observarlos, de prestarles atención y de saber qué significan sus señales. Veamos a continuación algunas maneras de orientarnos en la naturaleza.

Si nos perdemos de día, podemos orientarnos mirando al Sol. Para esto, es importante ubicar los cuatro puntos cardinales, y tener presente que el Sol sale por el este, y se pone por el oeste.

Si nos desorientamos durante la noche, podemos buscar algunas constelaciones claves:

• la Cruz del Sur, si estamos en el hemisferio sur;
• la Estrella Polar, en cambio, si estamos en el hemisferio norte.

Otros elementos naturales que pueden servirnos son el crecimiento del musgo o la hierba. Si bien puede haber variaciones en algunos lugares específicos, el musgo suele crecer en el área más húmeda de un tronco, por lo que apuntará, siempre, al norte.

Con las montañas ocurre algo semejante: el lado orientado al norte tiene menos luz del sol, por lo que será el área más fría que podamos detectar a la distancia.

Citar este artículo

Fernández, A. M. (17 de mayo de 2022). Definición de elementos naturales. Tipos, ejemplos y características. Definicion.com. https://definicion.com/elementos-naturales/