Definición de jerarquía

La palabra jerarquía deviene del griego hierarchía (ἱεραρχία), y está formada por dos partes. Por un lado, hieros, cuyo significado es divino o sagrado y, por otro, arkhei, que hace referencia a tener un orden. Entonces, podemos definir este concepto como una estructura que establece un orden divino o sagrado.

Si bien parece una noción relacionada con lo angelical, el término que aquí estudiamos organiza los grados de subordinación entre elementos que componen una misma base. Decimos elementos porque la jerarquía puede existir en diferentes contextos como, por ejemplo, en el reino animal, en el mundo de las ideas, los valores, las leyes, las dignidades, etc.

Como una jerarquía se estructura a partir de un nivel de subordinación, existen criterios para establecer su orden. El mismo se desarrolla en forma ascendente o descendente, según sea cómo se analice la disposición. Sin embargo, los parámetros básicos son los siguientes:

• Superioridad
• Inferioridad
• Anterioridad
• Posterioridad

Esto permite determinar que existe una relación entre los elementos de la estructura en el que uno está supeditado a otro en la escala. El motivo de esta subordinación puede ser diverso como, por ejemplo, fuerza, poder, categoría, autoridad, etc. En un principio, el vocablo refería a conceptos o elementos eclesiásticos o enlazados con la divinidad. Fue a partir de allí que surgieron las sociedades teocráticas. En la actualidad, la noción se aplica a temas vinculados con la economía y las esferas de poder o autoridad.

Básicamente, una jerarquía permite dilucidar las cadenas de mando que existen en la división de roles o responsabilidades que los miembros de una estructura tienen dentro de un contexto concreto. Es una manera de organizar una sociedad, una empresa o, simplemente, un estilo de vida.  

Características de una jerarquía.

Como bien ya mencionamos, la jerarquía supone una estructura de subordinación, como tal reúne una serie de características. Nombraremos las principales a continuación.

• Determina el valor o el poder de los elementos.
• Agrupa los elementos de acuerdo a categorías.
• Establece un orden cuantitativo y cualitativo.
• Fija roles y responsabilidades según los diferentes escalafones jerárquicos.
• Caracteriza la capacidad o preparación de cada uno de los elementos.
• Sigue una normativa para su creación, no es espontánea.

Cabe destacar que todos los miembros de dicha estructura deben estar en conocimiento de los tipos de subordinación para responder, con excelencia, al rol o tarea específica que le corresponde.

Asimismo, una jerarquía tiene una función muy clara y a la vez esencial, pues, sin ella, no sería posible realizar una tarea de modo ordenado. Es por ello que podemos afirmar que la función de una jerarquía es la de ser un mandato lineal. Esto quiere decir que aquellos que estén en la parte superior de la jerarquía deben tener la capacidad de planificar las acciones que, luego, los que están en la parte inferior tienen que ejecutar. Lo cual se logra gracias a colocar, en cada eslabón, los elementos necesarios cuya capacidad responde a la labor que están comprometidos a cumplir.

En el reino animal no ocurre exactamente así. Más que por capacidades o conocimientos, el punto de apoyo de cada especie o ejemplar dentro de una jerarquía será a partir del tipo de fuerza y autoridad que ejerza sobre los demás miembros.

Asimismo, esta disposición permite tener un control de las actividades a realizar y reunir los elementos necesarios para llevarlas a cabo. Recordemos que una jerarquía establece posiciones o niveles de mando a partir de los cuales se organizan las tareas a concretar y se especifican los responsables de las mismas.

Tipos de jerarquía.

Existen múltiples tipos de jerarquía, ya que los ámbitos en los que se aplican las estructuras, con roles y funciones determinadas, son diversas. Así encontramos jerarquías tanto en la vida de los animales como en la vida humana. Veremos los tipos de jerarquía más conocidos.

Jerarquía social.

La jerarquía social está relacionada con el grupo social al cual pertenece la gente. Este punto está conectado con lo que describimos líneas atrás. En la actualidad, la jerarquía está condicionada por cuestiones económicas. Entonces, este tipo de jerarquía refiere a la condición socioeconómica de un individuo, a partir del cual se lo coloca en alguna de las tres categorías o escalafones sociales:

1. Clase alta
2. Clase baja
3. Clase media

A partir de esta jerarquía, los Estados pueden determinar qué clase de ayuda social brindar a la población de acuerdo a sus necesidades reales.

Jerarquía empresarial.

La jerarquía empresarial es la que más se conoce hoy en día o de la que más se habla, pues aquí se necesita establecer un orden para fijar los roles, y responsabilidades de cada quien, dentro de un entorno laboral.

Alude, más que nada, al rango de posiciones que tiene cada integrante de una compañía. Este rol debe responder a capacidades y habilidades individuales, pues solo así cada empleado será capaz de evidenciar un desempeño adecuado y cumplir con lo que se espera de él o del puesto que ocupa.

La jerarquía empresarial se manifiesta en un organigrama, una especie de «fotografía» real de la estructura organizacional. Esta herramienta muestra los departamentos que existen en la firma, roles y funciones que cumplen, y, sobre todo, los sistemas de mando. En ellos se encuentran los siguientes puestos:

• Presidente
• Vicepresidente
• Director ejecutivo
• Directores de cada departamento
• Gerentes
• Supervisores
• Operadores

Jerarquía en la iglesia.

La jerarquía en la iglesia es, quizás, una de las más antiguas que se conozcan, pues aquí se marca la distinción entre cleros y laicos.

Entre los cleros, quienes representan a la institución religiosa, hay una estructura que les permite cumplir con ciertas tareas.

En el caso de la iglesia, la jerarquía es ascendente y está organizada a partir de la existencia de los siguientes puestos:

• Papa
• Cardenal
• Patriarca
• Primado
• Arzobispo
• Obispo
• Presbítero
• Diácono

Jerarquía de leyes.

La jerarquía de leyes se refiere a la organización que deben tener las normas que apuntan a mantener el orden político, judicial y social de un país.

Estas jerarquías varían en función de cada territorio, ya que cada nación posee su propia modalidad de conformar el valor y dependencia de cada normativa. Por lo cual, profundizar en este punto sería adentrarse a la legislación de cada uno de los distritos que existen.

Podemos afirmar que la jerarquía de leyes describe el orden existente en el que se establece que una norma o ley tiene más peso que otra y que, por lo tanto, debe ser superior a las demás y respetada como tal.

Jerarquía animal.

La jerarquía animal hace foco, básicamente, en cómo el reino animal organiza su poder o autoridad teniendo en cuenta la fuerza y capacidad para cuidar a su manada.

Aquí encontramos grupos de animales como, por ejemplo, los leones. Uno de ellos es considerado el amo de la manada por su poder para luchar contra sus rivales y con todos aquellos depredadores que quieran atacar a su descendencia.

Jerarquía militar.

La fuerza militar cuenta con su propia jerarquía, es decir, con un sistema de mandos. Gracias a él se cumple la tarea de defender un territorio y garantizar la soberanía nacional. Esta estructura debe estar organizada, por ello se desarrollan planes para proteger el suelo por el cual la fuerza militar responde. Sirve, además, para establecer el modo de desplegar un ataque, en caso de ser necesario.

Cabe destacar que cada país dispone de una estructura o jerarquía propia. En la mayoría de las naciones, sin embargo, el cargo de Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas recae en los hombros de quien ocupe el puesto del Poder Ejecutivo. Asimismo, se reconoce un orden jerárquico que marca roles como los de capitán general, teniente general, coronel, sargento, cabo y soldado.

Citar este artículo

Navicelli, V. (18 de abril de 2022). Definición de jerarquía. Características y tipos de jerarquías. Definicion.com. https://definicion.com/jerarquia/